Una plataforma fantasma enreda el juicio de Facua contra Volkswagen
Una supuesta asociación de afectados acusa a Facua de lucrarse con el juicio contra el fabricante alemán. Pero ni las denuncias ni sus responsables aparecen
Una plataforma fantasma de afectados ha enredado el juicio de Facua contra Volkswagen por la manipulación de los motores. Una campaña contra Facua salpica el proceso lleno de acusaciones cruzadas por el fraude en las emisiones contaminantes.
Facua inició un proceso contra Volkswagen por el fraude masivo de la manipulación de motores que ha sido reconocido por el propio fabricante. La asociación de consumidores se unió a la querella que impulsó Manos Limpias en septiembre de 2015, apenas un mes después de que el fabricante reconociera la manipulación. En este proceso, Facua ha logrado una cifra elevada de afectados: más de 6.000, según asegura la propia asociación.
Pero ahora, el acusador ha resultado acusado, aunque con una denuncia fantasma, sin afectados visibles ni portavoces ni denuncias judiciales. Una plataforma clandestina asegura haber presentado en noviembre una denuncia contra Facua por una presunta estafa.
La «Plataforma de Afectados de Facua» acusa a la asociación de consumidores de haber facturado un millón de euros a costa de los afectados por el caso Volkswagen. Aseguran que Facua sólo se unió a la querella de Manos Limpias contra el fabricante y que exige unos 90 euros más la cuota de socios para representar a los afectados.
Las inconsistencias
La denuncia contra Facua ha sido recogida en dos medios de comunicación: un diario local de Sevilla y una conocida web de noticias del mundo empresarial y de las relaciones públicas. Ambas publicaciones dan por cierta la denuncia de la supuesta plataforma.
Los denunciantes anónimos usan una cuenta de Twitter y un teléfono donde nunca hay respuesta. Nos ponemos en contacto con ellos a través de la cuenta pero se resisten a hablar, conceder entrevistas o entregar documentos. Se limitan a asegurar que toda la información de la plataforma y la demanda se encuentra en la web Pasión por las Ruedas.
La web, sin teléfonos ni dirección ni responsables visibles, se limita a copiar y pegar textualmente textos y fotos de otras publicaciones del sector como Motor.es y Motorpasión. Es decir, usa como relleno textos copiados de otros medios para promocionar la denuncia contra la asociación que lleva el juicio contra el fabricante alemán. La dirección en la que se registró la web es un descampado en Humanes (Madrid). La plataforma nunca ha aclarado en qué juzgados ha sido presentada la demanda.
Facua, que no ha sido notificada por los tribunales sobre ninguna denuncia, asegura que ha sufrido algunos ataques en redes sociales por parte de perfiles falsos cuyos propósitos hasta ahora desconoce.
«En este caso, nos acusan de cobrar unos honorarios por los trámites del juicio. Facua no obliga a nadie a que los pague. El que quiera denunciar a Volkswagen por su cuenta, puede hacerlo, pero quien se adhiere a la querella, debe pagar las cuotas por el juicio y también, lógicamente, las cuotas de socio. Las cuotas por el juicio incluyen abogado y procurador», explica Rubén Sánchez, portavoz de la asociación.
La financiación de las asociaciones
Facua recibió más de 425.000 euros en 2015 y casi 250.000 euros en subvenciones, según sus cuentas anuales. No desmiente que la querella colectiva haya generado ingresos elevados a la asociación (que, sumando todas las cutas, podrían llegar al millón de euros), pero niega tener ánimo de lucro. Asegura que la mayor parte de sus ingresos (más de 280.000 euros en 2015) están destinados al pago de personal y que sus cuentas son públicas.
En España, cada asociación de consumidores mantiene un esquema diferente de sustento. OCU, una de las principales organizaciones de consumidores y usuarios de España, posee una filial mercantil, OCU Ediciones, que factura unos 25 millones de euros anuales, según sus cuentas en el Registro Mercantil. Es decir, la entidad sin ánimo de lucro se sustenta gracias a la venta de revistas y a las cuotas de socios.
La cúpula de Ausbanc, que mantuvo confrontaciones tanto con OCU como con Facua, está siendo investigada por extorsión a banqueros y empresarios. Ausbanc, la entidad que fue dirigida por Luis Pineda, y Manos Limpias, que ha terminado prácticamente desarticulada tras la detención de su director Miguel Bernard, usaron el caso de Volkswagen para extorsionar al fabricante alemán, según los pinchazos telefónicos de la policía que precipitaron el arresto de Pineda y Bernard.
Ausbanc, que también editaba revistas, sustentaba su negocio con la venta de publicidad, aunque los tribunales investigan posible coacción a las empresas.