Tres candidatos pujan por los activos de Establiments Miró
La administración concursal amaga con vender la compañía a trozos si no mejoran las ofertas
La puja por Establiments Miró, en quiebra desde marzo pasado, entra en su fase final. Finalmente, sólo tres compañías han presentado oferta para adquirir los activos: Establiments Nou Model –sociedad encabezada por directivos de la actual firma–, una empresa controlada por varios socios de Abac Capital y finalmente Sherpa Capital. Por el camino, se han quedado los fondos Sun Capital y HIG y el grupo portugués Worten.
La apertura de plicas, celebrada este martes en los juzgados de Barcelona, ha revelado tres ofertas con una inversión económica muy similar que no han contentado al administrador concursal, Antonio Carreño, de Cuatrecasas Gonçalves Pereira, a juzgar por sus palabras. “Les planteo la posibilidad de liquidar la empresa activo por activo”, ha asegurado en sala a los postores con el objetivo de estimularles a que mejoren las ofertas de cara a la próxima vista, que se celebrará lunes que viene.
Las tres ofertas
La oferta presentada por Electrodomèstics Nou Nodel ofrece 500.000 euros por los activos de la compañía. También aseguran que mantendrán a la totalidad de la compañía, así como todos los puntos de venta. Por su parte, Sherpa Capital realiza una propuesta de 300.000 euros y plantea mantener abiertas 38 tiendas. En tercer lugar, los socios de Abac Capital han realizado la oferta menor, de 250.000 euros, y la promesa de contar con 64 tiendas y sus 361 empleados.
Las tres ofertas presentan diferencias también en las garantías asumidas y en los costes de arrendamiento de los locales. No obstante, la administración concursal dará prioridad a la oferta que mantenga más puestos de trabajo.
El concurso de acreedores
La empresa catalana, que emplea a 566 personas en 80 tiendas y factura 140 millones de euros, volvió a caer en concurso de acreedores al no poder cumplir los términos del convenio alcanzado a finales de 2011. La firma contaba entonces con un pasivo de 282 millones de euros.
Por su parte, Francesc Miró, fundador de la compañía, fue declarado culpable de la quiebra.