Todas las oportunidades de crecimiento de Cellnex
La compañÃa española tiene 1.800 millones para crecer y dos mercados por consolidar, aunque mira a toda Europa
La compañía de infraestructuras de telecomunicaciones Cellnex cerró un 2016 muy activo en cuanto a compras. Francia, Holanda y el Reino Unido lo atestiguan. Había oportunidades y las aprovechó para cumplir con su objetivo principal: la expansión por Europa.
Este 2017 ha empezado con fuerza, con una inversión de 850 millones en Francia, aunque ahora mismo las opciones son algo más difusas. Aun así, el consejero delegado de Cellnex, Tobías Martínez, ya lo avisó: «Nunca entramos en un mercado sin identificar posibles proyectos futuros».
La multinacional participada por Abertis y Criteria está en la primera fase en dos países, Holanda y el Reino Unido, y su intención es consolidarse ganando volumen. Pese que no hay abiertos procesos de venta claros, Cellnex es proactiva, como Martínez avisó, y está rastreando dichos mercados.
El Reino Unido es el más goloso, por volumen, y el Brexit no preocupa, según su consejero delegado. Allí hay una gran operación en marcha, aunque está en una fase muy inicial: la venta de Arqiva, una compañía con una estructura de activos similar a la de Cellnex, formada principalmente por torres móviles y de televisión, así como bien preparada para la tecnología 5G.
Arqiva, que cuenta con unos 8.000 emplazamientos en el Reino Unido, cerró su último ejercicio, el 30 de junio de 2016, con unos ingresos de 884 millones de libras (más de 1.000 millones de euros) y un ebitda de 424 millones de libras (500 millones de euros).
El problema puede ser el precio que pide, de entre 6.000 y 7.000 millones de euros, algo optimista según los analistas británicos. Cellnex nunca ha acometido una operación de este calibre, y tiene una caja de 1.800 millones para compras.
No obstante, fuentes del mercado advierten de que hay opciones alternativas para ofertar por Arqiva, como ir con un socio financiero. La multinacional presidida por Francisco Reynés ya atacó una operación importante –la de Inwitt en Italia, de 3.000 millones–, y lo hizo con el fondo F2i. Por tanto, aunque la venta todavía está en fase de estudio por parte de Arqiva, en Cellnex la van siguiendo con atención.
En Holanda la situación no es más clara. Al contrario. No hay ningún proceso de venta abierto, pero esto no significa que no haya oportunidades. Se trata de un mercado mucho menos concentrado que el británico, con lo que se puede crecer con varias operaciones más pequeñas. Dependerá del precio y del valor que aporten a la compañía española.
En Francia Cellnex se encuentra en una fase intermedia. No está tan consolidada como en España o Italia, donde es el operador independiente líder, pero acaba de hacer una operación con Bouygues que tiene que desarrollar durante los próximos meses, por lo que está centrado en ello. Pero si surge una oportunidad, no puede descartarse nada.
Nuevos mercados
Estas son las posibilidades en los países en los que Cellnex ya tiene negocio. Pero sigue mirando a toda Europa Occidental para ampliar su perímetro. En el capítulo de posibles nuevos mercados, hay una opción y una anhelo: Suiza y Alemania.
En Suiza, Sunrise ha abierto la venta de 2.500 emplazamientos, a un precio que el mercado sitúa alrededor de los 450 millones de euros. Tobías Martínez reconoció en la presentación de resultados de Cellnex que la compañía está evaluando esta operación, pero no tiene una decisión tomada.
Alemania es por ahora sólo la fruta prohibida. No sólo para Cellnex, sino para todas las compañías del sector que está pujando por activos en Europa –principalmente, American Towers y Cellnex–. Como pasó en Italia, está pasando en Francia y parcialmente en España, uno de los principales operadores móviles podría venderse las torres: Deutsche Telekom.
Las autoridades europeas de la competencia lo ven con buenos ojos, ya que el hecho que las infraestructuras estén en manos de independientes fomenta la aparición de nuevos operadores. Y a las compañías que venden sus torres les va como anillo al dedo para hacer caja y reducir deuda, como ha hecho Telefónica con Telxius.
No obstante, pese que a mediados de 2016 se rumoreó que Deutsche Telekom seguiría estos pasos, la venta quedó congelada. Sería una operación valorada en 5.000 millones de euros que permitiría a su ganador entrar en el mayor mercado de Europa por la puerta grande. Por ello las principales compañías del sector están a la espera de la decisión de Deutsche Telekom.
En Alemania, Suiza, Holanda, el Reino Unido o quizá en otros países, oportunidades habrá. Pero Cellnex no puede ir a por todas, especialmente por el coste que tendría, pero también porque va a seleccionar. Lo advirtió su consejero delegado y ya lo hizo en Francia, donde se retiró de la puja por FPS por su baja rentabilidad.