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El teletrabajo evita hasta 712 kilos de CO2 al año por persona
Un informe realizado por Telefónica, Vida Conectada 2023, calcula que el trabajo en remoto puede reducir la huella de carbono de sus clientes residenciales entre 112 y 712 kilos en España, Alemania y Brasil. La formación online, en España, por su parte, evita 213 kilos de CO2 al prescindir de más de tres traslados a la semana
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El teletrabajo y la formación online permiten reducir considerablemente la huella de carbono de los ciudadanos que realizan estas prácticas, según un reciente estudio de Telefónica, Informe Vida Conectada 2023, que analiza cómo el acceso a la red abre la puerta a una serie de tecnologías y aplicaciones cuyo uso permite cambiar determinados hábitos y elegir opciones más sostenibles.
En concreto, el teletrabajo evita entre 112 y 712 kilos de emisiones de CO2 a la atmósfera. Se trata de una contribución importante, si se piensa que aproximadamente el 45 por ciento de los españoles encuestados para este estudio teletrabajan entre dos y tres días a la semana, de media.
«Además de la flexibilidad personal que aporta, reduce nuestra huella de carbono, al ahorrarnos desplazamientos al centro de trabajo. No nos olvidamos de que esta práctica también supone el aumento en el consumo individual de energía por calefacción y aire acondicionado en el hogar, pero aun así el impacto es muy positivo», señala el informe elaborado por la compañía de telecomunicaciones española.
La formación online evita 213 kilos de emisiones por estudiante en España
La formación online es la versión educativa del teletrabajo y también realiza una contribución muy positiva a la lucha contra el cambio climático. Específicamente, cada encuestado que opta por la formación online ahorra 213 kilos de emisiones de CO2 a la atmósfera.
Al igual que el teletrabajo, este hábito digital está bastante extendido en nuestro país, de manera que el 57 por ciento de los clientes españoles de la operadora de telecomunicaciones afirman estar formándose en remoto a través de herramientas digitales.
Por encima de Alemania
Se trata de una proporción que supera a países como Alemania, donde este porcentaje se sitúa en el 36 por ciento.
«La conectividad digital facilita el acceso a la educación sin salir de casa a través de la formación online. Esto, además de ayudar a la conciliación con el trabajo, la familia y cualquier circunstancia personal, ahorra emisiones de carbono por los traslados que se evitan», dice el informe.
Y es que la conectividad y las soluciones digitales ofrecen nuevas posibilidades que hacen posible una menor huella de carbono y frenar el impacto sobre el planeta.