Telefónica mejora las condiciones económicas de su plan de salidas voluntarias
La dirección de la compañía ofrece hasta el 65% del sueldo a los nacidos antes de 1967 y limita las salidas a 3.000 trabajadores
José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica. EFE
Telefónica y los sindicatos continúan con el tira y afloja en la negociación para cerrar el plan de salidas voluntarias de la plantilla. La dirección de la compañía ha presentado una nueva propuesta a los representantes sindicales, que elevará hasta el 65% el porcentaje de sueldo que cobrarían los menores de 54 años que se den de baja.
La nueva oferta mantiene en un 67% el salario que percibirían los empleados nacidos en 1967 que soliciten abandonar su puesto, pero eleva hasta el 65% el de los nacidos antes de esta fecha. En la anterior propuesta el porcentaje para este colectivo era del 63%, lo que supone un importante incentivo para los más jóvenes.
La compañía que preside José María Álvarez-Pallete ha trasladado esta nueva alternativa en la última ronda de conversaciones con Comisiones Obreras (CC.OO.) y la Unión General de Trabajadores (UGT). Sin embargo, los dos sindicatos mayoritarios se han dado un tiempo para reflexionar sobre la propuesta antes de emitir una valoración definitiva.
Este paso se produce después de dos semanas de negociaciones, en las que la empresa de telecomunicaciones ha ido mejorando las condiciones de su plan de salidas para tratar de seducir a los sindicatos. El volumen de empleados que podrán acogerse se ha incrementado ya por encima de los 3.000, frente a la oferta inicial cercana a los 2.000.
Telefónica también se ha comprometido a prorrogar un año más la vigencia del actual convenio colectivo hasta el 2023, lo que permitiría mantener las condiciones salariales para más de 15.000 trabajadores de la entidad, tal y como solicitan los representantes sindicales.
El acceso al plan de salidas lastra la negociación con los sindicatos
Más allá del número de personas que podrán acogerse al plan de salidas voluntarias y de sus condiciones salariales, el principal motivo de fricción en la negociación radica en qué perfiles podrán participar. Los sindicatos apuestan por permitir a cualquier empleado sumarse, pero la dirección de Telefónica quiere desprenderse fundamentalmente de puestos no estratégicos.
En su última oferta, la empresa ha elevado hasta el 20% el porcentaje de trabajadores de áreas esenciales que podrían sumarse al plan. En esa bolsa de empleados hay 1.271 personas que potencialmente podrían solicitar su salida, pero solo uno de cada cinco entra en los planes que maneja Telefónica.
Los negociadores de Comisiones Obreras y de UGT ya lograron que se introdujera entre los posibles beneficiados también a los mandos que dirigen las secciones, pero no han logrado conseguir un plan de salidas universal, al que no está dispuesto a llegar la dirección. De ahí, que las negociaciones sigan estancadas y en periodo de reflexión.
«No podemos sino exigir que la empresa abandone su postura inmovilista sobre el resto de los aspectos ya mencionados por ambas organizaciones, y por ello hemos emplazado a la empresa a que modifique su posicionamiento, abogando por llegar a un punto de entendimiento que satisfaga a ambas partes», han expresado en un comunicado conjunto.
