Telefónica tiene por delante más de 3.000M en inversiones en 5G
La multimillonaria subasta de 5G en Alemania ha sido la primera puja de la oleada que viene entre 2019 y 2020 en mercados clave para el grupo español
Telefónica y el resto de empresas de telecomunicaciones tienen por delante una intensa actividad de subastas de espectro de 5G, que va a multiplicar su factura de inversiones, y también las posibilidades de conectividad a las redes y la, previsiblemente, la oferta de servicios de las operadoras.
En España, Vodafone España estrena este fin de semana su 5G en 15 ciudades, después ya de haber sido el encargado de permitir la primera llamada a nivel mundial con esta tecnología, y a pesar de la polémica entre Huawei y Donald Trump.
Pero el desarrollo de esta nueva red tiene mucho camino por delante y va a requerir que las operadoras se rasquen el bolsillo. El reciente resultado de la subasta de 5G en Alemania, donde la empresa presidida por José María Álvarez-Pallete ha tenido que desembolsar 1.425 millones por una parte del espectro.
De acuerdo con Moody’s, los 6.500 millones que han pagado las operadoras se queda por encima de lo esperado y puede ser negativo para su perspectiva de crédito. Esta valoración crea presión sobre el sector, porque sabe que el precio pagado en Alemania puede crear un precedente para las subastas que vienen por delante. Y son dos intereses enfrentados.
Por una parte, los estados ven en la subasta una oportunidad para mejorar los ingresos por lo que buscan al máximo optimizar los precios; por la otra, las telecos se enfrentan a una situación de vida o muerte: no pujar significa quedarse sin poder operar esa tecnología y les condenaría a la extinción en un determinado mercado.
Teléfonica, reducción de deuda para invertir
Ese dilema también se le plantea a Telefónica. La compañía española lleva años trabajando en reducir su deuda -en la junta de accionistas, Álvarez-Pallete explicó que la factura se había reducido en más de 14.000 millones desde junio de 2016-, pero ahora tiene por delante un importante reto en materia de inversiones.
Tras la reciente subasta en Alemania, se espera que a lo largo de los próximos dos años España, Reino Unido y Brasil -todos mercados claves para la compañía española- impulsen subastas de espectro. «Con este calendario y con Alemania, Telefónica tiene por delante entre 3.000 y 4.000 millones en inversiones en 5G», explica Javier Borrachero, jefe de análisis del sector de telecomunicaciones en Kepler.
Durante la junta de accionistas, el propio presidente de la teleco española reconoció que la incertidumbre sobre los costes de estas subastas era uno de los factores que pensaban negativamente en la cotización de la empresa en bolsa.
El sector lleva tiempo pidiendo prudencia a los gobiernos con los precios de las subastas de 5G para evitar que se produzca una catástrofe económica como generada por el UMTS. A Telefónica le generó unas pérdidas de más de 5.500 millones en 2002.
Entonces el sector no estaba sometido a la fuerte competencia de este momento, tras las fuertes bajadas en los precios acometidas en los últimos años, y el incremento de la oferta de servicios complementarios.
Un escenario que no se espera que vaya a menos, sino al contrario, porque la llegada del 5G puede provocar la entrada de nuevos actores a competir, como empresas ajenas al sector.
«Alemania ya se ha reservado un 25% del espectro de 5G para que compañías privadas pujen por él, lo que las habilitará a gestionar sus propias redes y conectar sus máquinas a ella», señala Javier Borrachero. «¿Quién nos puede decir con seguridad que en el futuro esas compañías no podrán alquilar sus a los vecinos de sus instalaciones?», se pregunta el jefe de análisis de Kepler.