Telefónica y Orange sufren la euforia sin control de la fibra: solo el 20% está en uso
El despliegue de fibra en España es la envidia de Europa, aunque ahora las empresas tienen la urgencia de generar rentabilidad
España ha presumido durante años del despliegue de fibra óptica. En consecuencia, las empresas que han ejecutado dichos desarrollos han sacado pecho. Además, los grandes países europeos iban a la zaga, algo por lo que presumir doblemente. Pero todo esto tenía un reverso: los operadores de telefonía -sobre todo, Telefónica y Orange-, en ese afán inversor, estaban generando una redundancia en el despliegue de FTTH. La consecuencia es que ahora queda mucha infraestructura sin utilizar.
En varios millones de hogares españoles, a cierre de 2021, hay accesos de fibra de Telefónica (25,2 millones) y Orange (15,3 millones). En algunos casos de Vodafone (3,7 millones), que también mezcla con su cable comprado a Ono; y en otros de MásMóvil (8,9 millones); ahora también Digi (1,2 millones), o compañías neutras o regionales. En definitiva, un despliegue que es la envidia de Europa, pero que ahora será complicado sacar partido -al menos a corto plazo-.
Así se refleja en los últimos datos oficiales que ha presentado la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre el desarrollo de la fibra en nuestro país. Según detallan, en 2021 continuó la inversión en el despliegue de accesos de fibra hasta el hogar, principalmente por parte del operador azul, así como de compañías alternativas. De este modo, a finales de año se alcanzaron un total de 65,9 millones de accesos FTTH desplegados (+15,5%), frente a los 57 millones del año anterior. Sin embargo, en España solo hay 12,5 millones de accesos de fibra, apenas un 20% de ese volumen total.
Es decir, que la inmensa mayoría de los accesos de fibra, que es la capacidad que tiene un operador de llegar a un hogar, estarían sin uso. Eso a nivel global dentro del sector. Al poner el foco sobre las dos principales empresas que han invertido en esta materia, los datos se extrapolan.
En concreto, Telefónica tenía registrado a finales del ejercicio pasado 25,2 millones de acceso de FTTH, según la CNMC. En cifras de clientes que usan la fibra del operador azul se resume en 4,8 millones de abonados. Orange, por su parte, tiene 15,3 millones de accesos, de los cuales tiene 3,5 millones de usuarios de fibra.
Lógicamente, nadie dentro de ambas compañías asume que la infraestructura se desarrolló para que fuera rentable de manera inmediata. Pero en España el ritmo de nuevas personas que usan fibra al año se sitúa en torno a los 500.000 accesos, una velocidad que puede causar dudas dentro de las compañías. Y, sobre todo, porque la competencia está más activa que nunca.
Cómo avanza la fibra
Por lo que respecta al desarrollo de esta tecnología, según los datos publicados por la CNMC, en los municipios de Madrid y Barcelona los accesos FTTH representaron el 88,8% y el 89,1% del total de accesos activos de banda ancha en estos municipios. En los municipios con población de menos de 5.000 habitantes el porcentaje de accesos activos de FTTH aumentaron en más de 15 puntos porcentuales en el último año.
Las mayores penetraciones de accesos FTTH se observaron en Barcelona y Madrid, con 39,7 y 37,3 accesos por cada 100 habitantes, respectivamente. Además de estas ciudades, también en municipios de menor tamaño se apreció un aumento notable de la penetración de accesos FTTH. En concreto, en aquellos con una población media superior a los 50 mil habitantes la penetración de accesos FTTH superó las 28,9 líneas FTTH por cada 100 habitantes, por encima de la media a nivel nacional.
Los operadores alternativos captaron el 84% de los nuevos accesos FTTH. La cuota de accesos activos NGA (fibra y cable) de estos operadores aumentó en todos los municipios y de un modo más destacado en las poblaciones de menos de 10.000 habitantes, en las que aumentó en más de siete puntos porcentuales; en Madrid y Barcelona, el aumento fue de 2,6 y 1,4 puntos porcentuales, respectivamente.