Telefónica se reúne 4 veces con la CNMC en el año que recibe una multa y un expediente
El operador azul asume que 2023 será un año de grandes movimientos regulatorios y quiere estar bien preparado
Telefónica. Foto de archivo
La sombra de incumbente todavía se alarga en Telefónica. La compañía sigue sometida a una gran regulación, y esto le hace que deba tener una relación fluida con los supervisores. Algo, para descanso de sus competidores, que no le ofrece mayor respiro. Al menos así se ha vivido este ejercicio.
En concreto, Telefónica ha sido una de las compañías que más reuniones ha tenido con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC); un total de cuatro. Asimismo, ha sido una de las empresas que más expuesta ha estado al propio regulador con la incoación de un expediente y la ejecución de una multa.
Por lo que respecta a ese segundo apartado, la vigilancia regulatoria, el último golpe para el operador azul ha llegado con el cierre del año. Así, la CNMC ha incoado un expediente sancionador contra Telefónica por un posible incumplimiento de los compromisos adquiridos en el marco de la operación de concentración Telefónica/DTS (Canal+) en abril de 2015.
Y es que, en julio de 2021, la CNMC declaró la existencia de indicios de incumplimiento de dichos compromisos. En ese caso se trataba de la oferta de productos Fusión+Smartphone, que incorpora servicios de televisión de pago. En concreto, la oferta posibilitaba que los clientes de Telefónica arrendaran terminales móviles inteligentes o smartphones a cambio de una cuota mensual de tres euros con carácter general y una permanencia.
En consecuencia, dicha oferta contenía determinadas previsiones contrarias a lo señalado en los compromisos respecto a la obligación de no aplicar condiciones o prácticas tendentes a entorpecer el cambio de los clientes actuales.
Un año vigilado
Pero no ha sido el único contratiempo regulatorio. En verano se incoó un expediente porque el Consejo de la CNMC declaró la existencia de indicios de incumplimiento de su obligación de remisión de información, en este caso fundamental para verificar el cumplimiento del compromiso que garantiza que la oferta mayorista por la que Telefónica pone a disposición canales premium a terceros tiene unas condiciones que permiten la replicabilidad efectiva por parte de terceros en sus ofertas minoristas que incluyen dichos canales.
Sin embargo, la CNMC ha verificado que, entre mayo de 2015 y, al menos, junio de 2020, Telefónica no aportó de forma puntual, correcta y completa la información debida.
Finalmente se estimó que Telefónica ha entorpecido la labor de vigilancia de los compromisos y la detección temprana de eventuales incumplimientos relativos a la replicabilidad de las ofertas comerciales de terceros operadores. Por todo ello, la CNMC ha impuesto a Telefónica una multa de 5 millones.
Las reuniones de Telefónica
Durante el transcurso de estos procesos regulatorios, Telefónica ha mantenido su hoja de ruta de reuniones con la CNMC para abordar, precisamente, este tipo de cuestiones.
El primer encuentro tuvo lugar con la directora de telecos, Alejandra de Iturriaga, para abordar cuestiones que se engloban dentro del marco regulatorio y que afectan a la compañía. Además, Telefónica se verá impactada de manera directa por la fusión de Orange y MásMóvil, y será importante cómo juegue sus cartas.
Justo antes del verano, Telefónica tuvo otro encuentro con la CNMC, y en este caso se trataba de algo más rutinario para abordar la situación en general del sector. Y fue poco antes del iniciar el otoño cuando el operador azul tuvo una gran reunión institucional con el regulador donde estaba presenta la propia presidenta del organismo, Cani Fernández.
Finalmente, en noviembre ha habido otro encuentro de carácter sectorial, donde también se ha contado con diversos directores del regulador, así como la presidenta.
