Simon deja atrás la recesión y factura más que el año anterior
El director general del grupo de material eléctrico, muy dependiente de la administración local, no muestra preocupación por las elecciones
El grupo senior de material eléctrico e iluminación en España, Simon, certifica un cambio de tendencia económica en 2014. Por primera vez desde que empezó la crisis, cierra un ejercicio con una facturación mayor que la del año precedente: 260 millones. La senda es positiva y el nuevo director general, Luis Lopezbarrera, muestra su «optimismo a pesar de las incertidumbres». Como la que puede desatar en los mercados una victoria de Podemos. Si esto ocurre, tampoco prevé un cambio de rumbo brusco.
El directivo señala que hay indicios que propician que siga la estabilidad en el país. «Una cosa son las políticas que un partido quiera hacer, otra las que puede hacer y otra distinta las que realmente hará», añade.
Ejemplo de Grecia
Lopezbarrera manifiesta que el auge de Syriza en Grecia no ha terminado con la debacle que las opciones más pesimistas esperaban (y que tomaron alas en las cotizaciones del Eurostoxx en los primeros días tras los comicios). El debate sobre el futuro de la deuda del país heleno está ahora «encarrilado» y la incertidumbre se disipa.
«En la economía, al final, todo el mundo es práctico», sentencia. Especialmente en el caso de las empresas. «Al final, se adaptan al entorno de la mejor manera posible».
Elecciones municipales
A Simon sólo le afectan las elecciones municipales, indica su director ejecutivo; y de forma positiva. Los ayuntamientos apuestan tradicionalmente por lavar la cara de las localidades antes de los comicios y multiplican los contratos de obra pública. Aunque la crisis también se nota en las corporaciones municipales y el nivel de encargos actual es menor que el de los comicios precedentes.
Objetivo económico: facturar 300 millones
Para el ejercicio en curso, Simon se fija como objetivo «acercarse a los 300 millones de facturación». La cifra aún está por debajo de los 346 millones ingresados en 2007, el año en que el grupo batió su último récord, pero implicará la consolidación de la compañía.
El mercado internacional será quien tire del carro, ya que las ventas exteriores representan el 65% de los ingresos del grupo (al inicio de la crisis eran sólo el 25%).
Más factorías en China e India
Los mercados polaco, mexicano y, especialmente, chino serán las palancas del crecimiento. El país asiático supone el 30% de la facturación global de Simon, dos puntos por delante de España, y es donde se concentra el grueso del negocio. Por ello, la compañía ha invertido en una tercera factoría de iluminación en la región.
Simon también estudia mejorar su capacidad de producción en India. Pretende ampliar el centro de producción actual para que también trabaje en el I D.