Sharp abandona definitivamente la sede de Sant Cugat
El grupo se traslada a Cornellà del Llobregat (Barcelona) para ceder su espacio a la multinacional Cirsa
Los 100 trabajadores de Sharp en España se han instalado definitivamente en el polígono Almeda Park de Cornellà del Llobregat (Barcelona). La compañía japonesa abandonó hace tres semanas la histórica planta de Sant Cugat del Vallès (Barcelona), que se ha traspasado junto a otros 100 empleados a la multinacional del juego catalana Cirsa.
Fuentes conocedoras de la operación han explicado a Economía Digital que en el acuerdo de cesión ya se estipulaba que Sharp se podía quedar cinco meses más en la factoría para traspasar poco a poco el negocio que mantienen en Catalunya. La red comercial y una pequeña parte de la línea de producción.
Reconversión
Tras la firma del pacto con la multinacional presidida por Manuel Lao, el 15 de septiembre del año pasado, Sharp anunció que abrían un proceso de reorganización en España y Portugal para centrarse en desarrollar productos de alto nivel tecnológico, más allá de los televisores que producían en Sant Cugat. Por ello, la cúpula japonesa dejó la dirección comercial de la compañía en manos del presidente de Sharp en España, Ventura Pobre. Sustituyó en el cargo a Javier Freijo.
La reconversión se desarrollará, previsiblemente, a nivel mundial. El fabricante japonés anunció este martes que elevaba el 31% su previsión de pérdidas para el último ejercicio fiscal, hasta los 3.600 millones de euros. De confirmarse, el beneficio neto de la multinacional contrastaría con los 182,6 millones que ganó el año anterior.
La prensa japonesa espera que emprenda el mismo camino que su eterno competidor, Sony. Este mismo martes cerró el ejercicio 2011 con unas pérdidas de 4.900 millones y el próximo jueves anunciará el nuevo plan de negocio del grupo.