Seat pierde 233 millones y vuelve a ser la única marca de Volkswagen en números rojos

La recuperación de Seat no se produjo en 2021. Si en 2020 la pandemia provocó unas pérdidas operativas de 339 millones de euros, la crisis de los semiconductores y la subida del coste de las materias primas fueron los grandes quebraderos de cabeza para la automovilística española durante el pasado año. Ambos factores motivaron que la filial de Volkswagen AG no abandonase los números rojos y, aunque los redujo un 31%, cerró la campaña con un resultado de -233 millones.

El conglomerado alemán presentó este martes los resultados del ejercicio 2021, en el que registró unos beneficios de 15.428 millones de euros impulsado principalmente por Audi (5.546 millones), Porsche (5.006 millones) y su división de servicios financieros (5.672 millones). Todas las filiales saldaron el año con ganancias a excepción de Seat y la empresa de camiones MAN (-276 millones).

La compañía con sede en Martorell (Barcelona) consiguió una subida del 4,5% de los ingresos, que saltaron desde los 9.198 millones de euros hasta los 9.614 millones de euros. La mejora llegó de la mano de un incremento de los automóviles vendidos: la cifra creció el 2,1% desde los 484.000 coches hasta los 494.000 coches. Esta cifra incluye el Audi A1 que se ensambla en la fábrica española.

Sin embargo, la recuperación de la facturación no logró dar la vuelta al resultado operativo de la empresa que preside Wayne Griffiths. Si en 2020 había perdido 339 millones de euros, en 2021 los números rojos fueron de 233 millones. «La mejoría en volúmenes fue ostensiblemente debilitada por la subida del precio de las materias primas y la escasez de semiconductores», lamentó Volkswagen en su informe financiero.

A lo largo de toda la campaña, la planta de Seat en Cataluña se vio afectada por cierres temporales y suspensiones de turnos por la falta de piezas. Además, tuvo que presentar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que estará vigente hasta al menos el próximo 30 de junio.

Durante la presentación ante los analistas, el director financiero del conglomerado, Arno Antlitz, se mostró especialmente crítico con el margen operativo de la enseña española, que fue del -2,4%. «A pesar de mayores ventas y un desarrollo alentador de la marca Cupra, Seat obtuvo un margen decepcionante de -2,4%. Esto deja claramente margen de mejora en 2022», dijo.

Cupra, la nota positiva

A pesar de cerrar otro año en números rojos, Seat también dejó motivos para ser optimista entre la cúpula de Volkswagen AG. Concretamente, el desempeño de Cupra, la marca premium de la empresa. «La mejoría de los volúmenes se debió especialmente a Cupra», recordó el grupo. De hecho, Cupra triplicó las unidades puestas a la carretera y las situó en 79.000.

Además, lanzó al mercado el primer eléctrico puro de la marca, el Cupra Born, del que se llegaron a producir 4.801 unidades. Sin embargo, la invasión de Ucrania obligó a parar durante días la planta de Zwickau (Alemania), donde se ensambla el automóvil, por lo que está por ver como avanzarán las ventas del vehículo en 2022.

El crecimiento de Cupra llegó especialmente por parte del Cupra Formentor, que saltó desde las 11.041 unidades fabricadas hasta las 58.863 unidades.