Seat arranca al Gobierno más ayudas para el coche eléctrico

Tras varios amagos a lo largo de las últimas semanas, el Gobierno aprobará este martes el primer Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (​PERTE) financiado con los fondos europeos. Será el del coche eléctrico, el mayor de los que tiene en cartera, y saldrá a la luz tras pactar más incentivos para la compra de vehículos limpios de los que tenía pensados en un principio. Lo hará por las presiones de Seat de incrementar la cuota de los automóviles enchufables en el parque español.

«Para fabricar eléctricos en España primero hay que venderlos», avisó Wayne Griffiths, presidente de la automovilística española, en varias ocasiones durante los últimos meses. Con la intención de producir eléctricos en España para el año 2025, esa es su principal preocupación. A pesar de la buena acogida que ha tenido en Barcelona y Madrid el plan Moves III, el directivo quiere más ayudas para un tipo de vehículo que sigue siendo más caro que la media del mercado.

Según explican varias fuentes a Economía Digital, la automovilística arrancó el compromiso de nuevas ayudas a la compra de coches eléctricos a la ministra de Industria, Reyes Maroto. La vía para aplicarlas no está clara, aunque el plan Moves III sería una posibilidad: actualmente dispone de fondos por 400 millones ampliables a 800 millones «si hay suficiente apetito», explicó el Ejecutivo.

La marca consigue así su objetivo de tener más apoyo público para que los vehículos enchufable representen el 10% de las ventas. “España no puede estar a la cola de Europa en electrificación”, lamentó Griffiths en mayo. “Solamente estamos por encima de Grecia; nuestro mercado roza el 5% si incluimos los híbridos enchufables, mientras que en otros países está en torno al 80% como en Noruega o el 10% en la media europea”, decía el dirigente británico.

Según los últimos datos hechos públicos por Anfac, de los 96.785 coches vendidos en junio, el 7,2% eran enchufables. El porcentaje no se limita solamente a los eléctricos puros, que supusieron el apenas el 2,66% del total. Mayor parte del pastel supusieron los híbridos enchufables, que ascendieron hasta el 4,62%. En total, 7.039 vehículos con algún tipo de componente electrificado.

El Gobierno también se compromete a disparar el número de puntos de carga

Más allá de las ayudas directas, el Ejecutivo también satisfará otra de las grandes demandas de los fabricantes: elevar la infraestructura de carga en el país. Con solo 8.000 puntos en el país, Seat pidió que la cifra creciera hasta los 28.000. El PERTE llegará para disparar el número de cargadores, al menos hasta las 20.000 unidades, añaden las mismas fuentes.

Anfac denuncia que existen seis tramos en la Península Ibérica en la que no hay cargadores eléctricos durante más de 100 kilómetros. Como ya explicó este medio, España es el penúltimo país de la Unión Europea al analizar la infraestructura de carga disponible, solo por detrás de Hungría.

El Gobierno aprueba al fin el PERTE

Una vez cerrados los detalles del PERTE con Seat, Pedro Sánchez podrá presentar ya este mismo lunes su primer gran proyecto transformador con los fondos europeos tras la crisis de Gobierno del fin de semana. Será después de que la ministra de Industria visitase la fábrica de la automovilística en Martorell (Barcelona) para desbloquear la iniciativa ante las dudas de la compañía a la hora del crecimiento del mercado eléctrico en el país.

El presidente tendrá así el gran anuncio deseado antes de marcharse de vacaciones, a pesar de que llegue con retraso: la intención inicial era aprobar el PERTE en junio. Tras la firma, está previsto que la convocatoria de las ayudas esté abierta entre octubre y noviembre.

Según las mismas voces, el proyecto contará con prácticamente 3.000 millones de euros de presupuesto: el 65% de los fondos destinados a grandes planes. De la cifra, alrededor de 1.500 millones serán ayudas a fondo perdido y otros 1.500 millones serán préstamos. El pago se realizará entre 2021 y 2023.

El consorcio del Gobierno con Seat

Aunque las ayudas son abiertas a todo el sector, está previsto que buena parte del pastel se lo llevé el consorcio público-privado constituido por el Ejecutivo, Seat, Iberdrola, Caixabank, Telefónica, Gestamp, Grupo Antolin, Ficosa y Sesé. De hecho, en la industria todavía no se conocen los detalles del PERTE, a pesar de que se invitó al resto de fabricantes con una planta en España a participar en él.

Por ello, existe una sensación extendida de que el proyecto es realmente un traje a medida para la filial de Volkswagen AG, lamentaron a lo largo de los últimos meses desde varias marcas a Economía Digital. A la denuncia se suma el Partido Popular. Fuentes del la formación lamentan la falta de transparencia existente hasta el momento en todo lo que rodeó a la financiación procedente de Bruselas.