Sánchez contagiará a Europa con el impuesto a la banca
Los analistas descuentan que otros gobiernos de Europa seguirán el mismo camino que España este invierno y anunciarán impuestos a la banca
España no será una ‘rara avis’. Los analistas entienden que el impuesto a la banca anunciado por Pedro Sánchez el pasado mes de julio se extenderá por toda Europa si la inflación continúa aumentando y la vida, encareciéndose. Italia y Grecia podrían ser los siguientes, pero en general, todas las entidades europeas están en situación de verse afectadas.
Así lo destaca un informe elaborado por S&P Global Market Intelligence, donde recuerdan que España se ha convertido en la economía europea más grande hasta la fecha en anunciar que gravará las ganancias de los bancos a través de un impuesto extraordinario. Y esto provocará un efecto contagio entre el resto de países.
Solo Hungría había anunciado previamente una tasa similar. Pero los analistas calculan ahora que se sumarán a la lista muchas entidades más y República Checa puede ser el siguiente país en anunciarlo. De hecho, el ministro de Finanzas ha dicho que el 10 de septiembre tomará una decisión al respecto.
Los de S&P explican que, la mala fama que tienen los bancos entre gran parte de la sociedad podría acentuar que más gobiernos decidieran replicar este impuesto. Particularmente en países con una elevada inflación y una alta relación entre la deuda y el PIB. Si se tiene en cuenta esto último, Grecia e Italia serían los siguientes.
Ambos países tienen las relaciones deuda/PIB más altas de la Unión Europea, alcanzando el 189% y el 152%, respectivamente. Además, los analistas apuntan a que Italia presenta bastante “riesgo” de ser el siguiente, una vez se hayan celebrado elecciones el próximo 25 de septiembre.
Pero hay otros cinco países que tienen ratios superiores al 100%, en concreto, Portugal, Francia, España, Bélgica y Chipre. Mientras que el Reino Unido, que ya no forma parte de la UE, tiene una relación deuda/PIB del 99,6%.
A esto se suman los efectos de la inflación, recuerdan los de S&P. El anuncio del gobierno español se produjo cuando esta alcanzó el 10,7% en julio, pero hay otros tres países que registraron una inflación superior al 20%, Estonia, Letonia y Lituania.
La inflación, que ya alcanza los dos dígitos en muchos países de Europa, seguirá aumentando y los gobiernos continúan estudiando todas las fórmulas necesarias para que el impacto en el bolsillo de los ciudadanos sea menor.
La recaudación, vía impuestos extraordinarios a la banca, parece ahora la mejor solución, pese a que el BCE ha desaconsejado por completo hacerlo. Los analistas recuerdan que varios gobiernos europeos ya han anunciado impuestos similares a las compañías de petróleo y gas, por lo que no les temblará el pulso para hacer lo mismo con el sector financiero.
«Los bancos se convertirán en el siguiente objetivo»
“Es probable que los bancos se conviertan en el siguiente objetivo si la crisis se profundiza durante el invierno”, apuntan. Sin embargo, hay más motivos por los que el sector se ha convertido en un “blanco fácil”. Uno de ellos son los resultados de las grandes entidades.
Los de S&P comentan que, en el segundo trimestre, muchos bancos han superado con creces las estimaciones de ingresos y beneficios de los analistas pese al deterioro de las perspectivas para la economía mundial.
Y de cara a este tercer trimestre, cuando realmente se empiece a ver el impacto de la subida de tipos de interés en sus cuentas, los gobiernos podrían verse tentados a anunciar un nuevo impuesto. De hecho, la preocupación por la posible propagación de este impuesto fue evidente en las conferencias con analistas que los bancos tuvieron en julio.
Según el análisis S&P Market Intelligence se preguntó en 8 de las 20 conferencias que tuvieron los bancos más grandes de la eurozona por activos totales.
En Europa crece la polémica
La posibilidad de que este nuevo tributo se extienda en Europa ha vuelto a generar bastante revuelo. La patronal europea de cajas de ahorros, (ESBG, por sus siglas en inglés), se pronunció públicamente este miércoles, rechazándolo y argumentando los motivos por los que puede afectar al crecimiento económico.
ESGB, que representa a los bancos minoristas y cajas de ahorro de 17 países europeos, defiende que, en el actual contexto de alta inflación y desaceleración económica, y con la posibilidad de una recesión acechando, “es más importante que nunca que las cajas de ahorro y los bancos minoristas preserven su solvencia”.
Y la decisión de imponer un nuevo impuesto sobre el sector bancario “reducirá aún más su capacidad de otorgar préstamos a empresas y particulares”. Además, considera que estos impuestos sectoriales son discriminatorios e injustificados, ya que es poco probable que el aumento de los tipos de interés genere beneficios extraordinarios.
Entre tanto, el sector bancario español mantiene su postura y sigue siendo muy crítico con el impuesto que Pedro Sánchez anunció hace ya dos meses, y con el que pretende recaudar hasta 3.000 millones de euros en dos años gravando con un 4,8% a las entidades que, sumando los intereses y comisiones, superen los 800 millones de euros.