Sabadell afronta el vencimiento de 8.500 millones de euros de créditos ICO
Una cuarta parte de los préstamos, algo más de 2.200 millones, se concentra en los sectores más afectados por la pandemia como turismo, hostelería y comercio
El consejero delegado y el director financiero de Banc Sabadell.
La gran mayoría de préstamos ICO expira este segundo trimestre del año, será el termómetro para medir la fortaleza de las empresas españolas tras dos años de pandemia. Banc Sabadell tiene un saldo vivo de 8.500 millones de euros y una cuarta parte de ellos, algo más de 2.200 millones, se concentra en los sectores más afectados por la pandemia.
En concreto, 1.088 millones en turismo y hostelería, 448 millones en transporte, 360 millones en automoción y otros 325 millones en comercio. El banco puso el foco desde el inicio de la crisis sanitaria en estos sectores porque eran los más susceptibles de que su actividad se viera afectada.
Sin embargo, vista la evolución de los créditos que ya han vencido en el primer trimestre del año se muestran optimistas con los que toca pagar ahora. Entre enero y marzo vencieron los primeros créditos (unos 234 millones) y el 92% de ellos “están cumpliendo”, solo un 8% son dudosos.
Así lo explicaba este jueves el director financiero de la entidad, Leopoldo Alvear, en la presentación de resultado. “Somos optimistas con la evolución, los niveles de turismo son cercanos a los de 2019 y entre nuestros principales clientes, la hostelería por ejemplo, ven con optimismo el verano”.
Asimismo, el directivo destacaba que del total de la cartera ICO, los 8.500 millones de euros de crédito vivo, solo un 5% son dudosos, siendo además ese 5% un ratio que se ha mantenido estable en cada trimestre. En este sentido, apuntaba a que además “son dudosos subjetivos” porque no todos tienen un retraso de 90 días o lo que es lo mismo, no han dejado de pagar más de tres cuotas.
Por ello, la evolución de morosidad se ha mantenido estable en el trimestre, en el 3,66%. A su vez recordaba que el 76% de estos créditos tienen cobertura del Estado, por lo que el banco solo tiene que proveer el 24% restante, «una cifra baja y controlable”.
A pesar de las dificultades de las empresas con el Covid, desde el banco catalán aseguran que no han visto ningún aumento en los índices de morosidad, que se mantienen en los mismos niveles que antes de la pandemia y creen que en los próximos años bajarán de manera natural.
Además, el ritmo de concesión de préstamos ICO se ha frenado de manera considerable, Banc Sabadell ha concedido unos 13.700 millones de euros de este tipo de préstamos desde 2020 y en el primer trimestre solo han sido 34 millones de euros.
Sabadell mantiene los 650 millones de provisiones Covid
Pese a que la evolución del Covid “ha sido más satisfactoria de lo que pensábamos hace dos años”, añadía Alvear, el banco no ha liberado los 650 millones de euros de provisiones Covid que se hicieron en 2020 para afrontar posibles impagos. “Contamos con un colchón suficiente para vencimientos de ICO”.
Sabadell no contempla que un escenario de mayor inflación como el que estamos viviendo actualmente en España tenga impacto en el pago de los ICO por parte de las empresas. Y de ser así, consideran que el coste del riesgo debe ser suficiente para afrontarlo. “Los ICO en el segundo trimestre serán un hito importante para el sector, pero creemos que los clientes podrán hacer frente”.
Aquí destacaba que la economía avanza, aunque lo haga a un menor ritmo del que se esperaba a principio de año, antes del estallido de la guerra de ucrania y de que se disparara la inflación. “Es verdad que vemos reducción de algunos indicadores macro para el 2022 pero hay que contextualizar, habrá un avance del 4,5% del PIB» y no una recesión.
El consejero delegado, César González-Bueno apoyaba esta aclaración. En su opinión, el impacto de la guerra será pequeño y sobre todo, muy inferior al del Covid. La economía crecerá aunque menos de lo esperado por la guerra, pero sigue siendo un dato positivo porque significa que nos estamos recuperando de la pandemia por las decisiones de política fiscal que se han desplegado en España y los países del entorno.
