Repsol traslada a sus accionistas los disgustos del petróleo barato
El grupo confirma las pérdidas históricas y recorta el dividendo un 20%. El mercado mete presión para que venda parte de Gas Natural a pesar de que el consejo decidió ayer mantenerse firme
Repsol confirmó el jueves que acumuló en 2015 las primeras pérdidas anuales de su historia a causa del desplome del precio del petróleo. Entorno que, como a otras petroleras europeas, le ha obligado a apretarse el cinturón y tomar medidas drásticas, como la de recortar el dividendo. Se barruntaba, incluso, con la supresión.
Además de confirmar pérdidas netas anuales de 1.227 millones tras las multimillonarias provisiones por la caída del crudo, el grupo, participado por La Caixa, anunció un recorte del 40% en el dividendo complementario, que será este año de 0,30 euros por acción. Trasladado al conjunto del ejercicio, la rebaja para la retribución al accionista es de aproximadamente el 20%.
La reducción coincide con la misma contracción que experimentarán las inversiones, que se corregirán en un -20%, para mantener el músculo financiero.
La bolsa reacciona positivamente
Las acciones de Repsol capitalizaban positivamente la noticia con un alza del 4%, el doble que el IBEX 35 –pese a la persistente caída del Brent– tras conocerse la medida, que podría aliviar parcialmente la presión sobre sus amenazados rating de deuda.
La constructora Sacyr, otro de los accionistas de referencia de Repsol, caía un 0,6%, aunque lejos de los peores niveles del día, mientras que Caixabank sumaba un 2%.
La supresión del dividendo, que finalmente sólo será recortado, era una de las medidas con las que especulaba el mercado para repeler el envite de agencias de calificación crediticia como Standard & Poor’s, que tiene en revisión el rating de BBB-, último peldaño del grado de inversión.
El culebrón de Gas Natural
Por otro lado, el consejo de administración no tomó ninguna decisión sobre la venta de Gas Natural, su activo más líquido con un valor en bolsa cercano a los 5.000 millones de euros. A pesar de ello, en el mercado persiste la rumorología sobre el traspaso de entre un 10% y un 15%. Las fuentes consultadas por Economía Digital enfrían la posibilidad.
Otros medios, como Expansión, advierten de que Repsol tiene la intención de vender y buscará el mejor momento para ejecutar la operación. «El recorte (del dividendo)… no resuelve el riesgo de rebaja del grado de inversión por lo que seguimos esperando una desinversión en Gas Natural», trasladan los analistas de Banc Sabadell a sus clientes.
El menudeo de la cuenta de resultados arroja, sin embargo, sólidos indicios para el negocio de la petrolera que pilota Josu Jon Imaz. Repsol confirmó que su resultado neto ajustado a reposición de reservas (CCS) subió un 9% en 2015 hasta los 1.860 millones de euros, con un margen de refino histórico que más que duplicó el de 2014.
Negocio sólido
En el negocio de exploración y producción, Repsol también destacó que la implementación de sinergias y medidas de eficiencia han llevado a que el punto de equilibrio, a partir del cual la extracción del barril de petróleo es rentable, sea a hora de 40 dólares por barril, «uno de los más bajos del sector».
Repsol anunció también el jueves la venta de su negocio de eólica marina en el Reino Unido al grupo chino SDIC Power en una operación de 238 millones de euros. La venta, dentro de su programa de desinversiones de activos no estratégicos, supondrá una plusvalía neta de 109 millones.
