Repsol invertirá 1.000 millones más de los previstos en renovables
La compañía incrementa la inversión en proyectos bajos en carbono durante el periodo 2021-2025 hasta un total de 6.500 millones de euros
Repsol da un paso más en su ruta hacia la descarbonización y este martes ha anunciado ante analistas e inversores que invertirá 1.000 millones de euros más de lo previsto en el Plan Estratégico (hasta los 19.300 millones) para aumentar su generación eléctrica renovable, producción de hidrógeno libre de emisiones, e impulsar otras iniciativas bajas en carbono.
La empresa que preside Antonio Brufau presentó en noviembre de 2020 el Plan Estratégico 2021-2025, el mismo tiene un objetivo claro: conseguir que Repsol sea una compañía cero emisiones netas en 2050, en línea con los objetivos establecidos en el Acuerdo de París sobre cambio climático.
Para ello, la energética estableció una hoja de ruta que incluye metas de reducción de emisiones, con una disminución de la intensidad de carbono del 12% para 2025, del 25% para 2030 y del 50% para 2040, frente al 10%, 20% y 40%, respectivamente, fijados con anterioridad.
Pero este martes Repsol ha anunciado un aumento de los objetivos intermedios de descarbonización para alcanzar la neutralidad en 2050, estableciendo una reducción del Indicador de Intensidad de Carbono del 15% en 2025, del 28% en 2030 y del 55% en 2040, frente a los anteriores del 12%, 25% y 50%, respectivamente.
Imaz ha detallado que destinará 1.000 millones de euros adicionales a proyectos bajos en carbono en el periodo 2021-2025, hasta un total de 6.500 millones de euros, frente a los 5.500 millones de euros establecidos en el Plan Estratégico.
De esta forma, la inversión destinada a iniciativas de bajas emisiones se situará en el 35% en el periodo 2021-2025 y el capital empleado para estos fines será del 45% en 2030. Los nuevos valores suponen un incremento de 5 puntos porcentuales respecto a los establecidos en el Plan Estratégico presentado hace casi un año.
La compañía ha aumentado el precio interno de carbono que se aplica a toda nueva inversión, diferenciando precios por tonelada de CO2 para inversiones dentro de la Unión Europea y el resto del mundo.
Así, fija un precio de carbono de 70 dólares por tonelada en 2025 y 100 dólares en 2030 para la Unión Europea (antes eran de 40 dólares tonelada en 2025 y 70 dólares en 2040) y de 60 dólares en 2025 en el resto del mundo (frente a los 40 dólares anteriores).
En la misma línea, ha establecido un objetivo más ambicioso de reducción de la intensidad de emisiones de metano, fijándola en el 0,20% en 2025. Esto supone una reducción del 85% frente a la anterior del 25%.
Repsol ha anunciado también, por primera vez, objetivos absolutos de reducción de emisiones. Así, establece el compromiso de reducir en 2030 el 55% de las emisiones en activos operados (alcance 1 y 2) y el 30% de las emisiones netas (alcance 1, 2 y 3).
La estrategia de carbono y sus objetivos serán sometidos a votación de forma consultiva en la próxima Junta General de Accionistas.
Repsol aumentará su capacidad de producción en renovables
Entre los nuevos objetivos anunciados por Repsol, también se encuentra un aumento del 60% de la capacidad instalada de generación renovable en 2030, hasta alcanzar 20 GW (frente a los 12,7 GW ya anunciados). En 2025, el nuevo objetivo de capacidad instalada se sitúa en 6 GW, que comparan con los 5,2 GW anteriores.
La energética planea continuar con el crecimiento orgánico de este negocio gracias al desarrollo de una cartera de proyectos en operación y desarrollo en países OCDE, reforzada tras la joint venture suscrita en Chile con Ibereólica Renovables en 2020, y la reciente adquisición del 40% de la compañía Hecate Energy en Estados Unidos
Actualmente, Repsol planea terminar el año con 1,7 GW de capacidad renovable instalada y con otros 4,7 GW en proyectos en construcción y con alta visibilidad.
En cuanto a la producción de hidrógeno renovable, la compañía ya anunció el pasado mes de julio la intención de alcanzar en 2025 una capacidad de generación equivalente de 552 MW y llegar a 1,9 GW en 2030, frente a los 400 MW y 1,2 GW, respectivamente, anunciados con anterioridad.
Y en lo que respecta a la economía circular, los complejos industriales de Repsol se están adaptando para utilizar múltiples residuos de diferentes orígenes, como materias primas para convertirlos en combustibles y materiales más sostenibles. El objetivo es utilizar tres millones de toneladas anuales de residuos y mitigar más de siete millones de toneladas de CO2 al año en 2030.
Asimismo, la compañía tiene el objetivo de producir 2 millones de toneladas de combustibles bajos en carbono en 2030. En el primer trimestre de 2023 está prevista la puesta en marcha de la planta de biocombustibles avanzados de Cartagena, que evitará la emisión a la atmósfera de 900.000 toneladas de CO2 al año.