Repsol lanza una ofensiva comercial contra Iberdrola y Endesa por el teletrabajo

La petrolera española está siendo una de las grandes animadoras del mercado eléctrico, y quiere subir el ritmo

Repsol

Sede de Repsol en Madrid. EFE/Zipi

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Repsol ha sido el último gran actor en llegar al sector eléctrico. Al menos con peso relevante. Después de muchos esfuerzos por crecer, y también a través de adquisiciones, la petrolera dirigida por Josu Jon Imaz quiere seguir metiendo presión a sus rivales, sobre todo Iberdrola y Endesa -líderes del sector-, y lleva varios días con importantes campañas de marketing activadas para ampliar su cartera de clientes, sobre todo en un nicho muy concreto: el teletrabajo.

Pese a que existen dudas sobre si esta práctica laboral se afianzará en España, lo cierto es que muchas empresas están permitiendo a sus trabajadores poder desarrollar su desempeño laboral fuera de la oficina. Y generalmente los empleados eligen su hogar principal como ‘oficina’ improvisada. El problema es que, en estos momentos, hay un alza de precios histórica que afecta a los clientes que tienen tarifas reguladas (PVPC). Esto supone más de 9 millones de usuarios sobre un total de 28 millones de instalaciones que existen en España. Por lo tanto, se trata de un mercado muy goloso. Y Repsol lo sabe.

De esta forma, la petrolera ha reforzado su ofensiva y ha creado una promoción para atraer clientes que directamente se llama ‘Tarifa Teletrabajo’. Entre los reclamos, en primer lugar, aseguran que se trata de una tarifa con energía 100% renovable. El siguiente punto llamativo es que ofrecen a los clientes la posibilidad de elegir horas, mientras estén en casa, que tendrán unos descuentos muy importantes.

En concreto, con esta esta tarifa el usuarios disfrutará de un 70% de descuento en tres de los cinco días laborables que elija y, en los otros dos, tendrá 4 horas promocionadas. Además, tiene 10 días especiales que podrás configurar de manera distinta. Aunque uno de los condicionantes, como sucede en las tarifas del mercado libre que no están sujetas al ‘pool’ diario, es que al cabo del año habrá que renegociar las condiciones. Lo que sí permiten desde Repsol es que si por circunstancias personales el cliente cambia de situación laboral, tiene la capacidad de elegir otra oferta dentro de la compañía.

Repsol avanza en la pelea comercial

Iberdrola y Endesa, que también tienen algunas ofertas con discriminación horaria, por el momento no han entrado al trapo de Repsol con tarifas concretas para las personas que ahora mismo se encuentran en situación de teletrabajo. Aunque hay otras empresas de menor tamaño que sí tuvieron en su portafolio este tipo de ofertas. Es el caso de Factor Energía, uno de los ‘outsider’ del sector que, poco a poco, va ganando peso y tamaño, pero que finalmente decidió retirar este tipo de promoción concreta.

Lo que parece evidente es que las grandes energéticas no van a parar de moverse, sobre todo mientras los precios de la luz estén disparados y no haya horizonte temporal para lo contrario. O al menos estabilidad. De hecho, hace unas semanas fue Naturgy la que realizó mayor esfuerzo para aumentar la captación de clientes, una situación parecida a la del pasado verano cuando también hubo un alza de los precios -aunque no del actual calibre-.

En estos momentos se ha vuelto a poner de manifiesto las grandes diferencias que hay entre el mercado libre, que fija los precios en contratos anuales entre las eléctricas y los consumidores; y el mercado regulado (PVPC), que está indexado al precio del ‘pool’ eléctrico diario, y cada mes tiene un precio variable. Esta segunda tarifa es la que ahora mismo está en entredicho por los costes del gas, que es la tecnología que marca los altos precios que ahora mismo existen y que, finalmente, se repercuten sobre la tarifa del ciudadano.

En este contexto, las compañías eléctricas han iniciado una auténtica guerra comercial que se divide en dos frentes. Por un lado, trasladar a sus propios clientes de una tarifa a otra, con el fin de ofrecer unos precios fijos sin estar sujetos al vaivén del ‘pool’; y, por otro, la pelea comercial con otras compañías para robar clientes a la competencia. Y precisamente se busca a los clientes regulados de otras empresas para argumentar que la tarifa fija es mejor.

Con todos estos ingredientes, a buen seguro que Iberdrola y Endesa intensificarán la captación de clientes. Sobre todo porque Repsol sigue en plena fase expansiva, y por detrás vienen las pequeñas comercializadoras que, pese a que su crecimiento no es tan exagerado, no dejan de ganar presencia en el mercado.

Raúl Masa

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