Rakuten vale la mitad desde que patrocina al Barça

Hiroshi Mikitani tiene mayores problemas que preocuparse por los fichajes del FC Barcelona. El fundador de Rakuten, principal patrocinador del conjunto azulgrana, ve como la irrupción de Amazon en Japón hace temblar los cimientos de su negocio. Desde que entró en vigor su acuerdo con el club catalán, en junio de 2017, la tecnológica nipona perdió el 40,3% de su valor en bolsa; desde los 1.372 yenes hasta los 818 yenes actuales (6,35 euros al cambio actual).

El descalabro llega motivado por la pérdida de cuota de mercado en su lugar de nacimiento. Según la Japan External Trade Organisation, la firma gestiona el 20,1% de las ventas online mientras que Amazon ya controla el 20,2% tras proponer una agresiva estrategia de precios que Rakuten no puede seguir.

Si hace dos años la división de e­-commerce representaba más de la mitad de los ingresos, en los resultados del primer semestre de 2018 sólo originan el 37% del dinero que entra en las arcas de la compañía.

Para tratar de recuperar terreno, en enero firmó un acuerdo con la principal cadena de hipermercados mundial, Walmart, para ofrecer un servicio de entrega de alimentos a domicilio en el país.

Rakuten diversifica su negocio en más de 70 divisiones por la caída del e-commerce

En paralelo, la compañía trata de diversificar su orientación. Hoy Rakuten está presente en más de 70 líneas de negocio tan dispares como agencias de viajes, tarjetas de crédito, planificación de bodas y seguros. Además, es accionista de compañías como Lyft y Cabify, de transporte, Viber, una plataforma de mensajería, o Glovo, de entrega de paquetería en ciudades.

Su última aventura, una empresa de telecomunicaciones, con la que espera captar 15 millones de clientes en los próximos años –el mercado japonés es de 165 millones de usuarios–. Pese a la multitud de opciones, los analistas consultados por The Economist leen las maniobras como “defensivas” por la pérdida de cuota de mercado.

Internacionalizarse de la mano del FC Barcelona

Centrada en el mercado japonés, la compañía podría aprovechar su alianza con el FC Barcelona para proyectarse a nivel internacional. No obstante, no parece que sea una expansión inmediata: en la presentación de resultados del primer semestre no hubo ninguna mención al negocio fuera del archipiélago asiático. 

Y no será por no haberlo intentado. Hace alrededor de un lustro, Rakuten trató de entrar en el mercado europeo, pero con Amazon ya en una posición dominante no logró hacerse un hueco. También trató de adentrarse en otros países emergentes del continente asiático, pero no tuvo éxito.