Panrico ficha a Vilas para salvar la difícil situación de la empresa

Panrico ha renovado los aires de su consejo de administración. El grupo dirigido por César Bardají se resiste a desaparecer con la incorporación de José María Vilas, expresidente ejecutivo de Unilever, en la presidencia del consejo tal como avanzó en su día Economía Digital. Encabezan su lista de prioridades hacer frente a los 350 millones de euros que se tienen que devolver hasta 2015, una cifra que en julio llegó a superar los 600 millones.

Entonces, y con una amenaza de absorción de la banca acreedora, Bardají consiguió renegociar el crédito dejando entrar en el accionariado a las entidades financieras y haciendo una ampliación de capital por importe de 288 millones de euros. Una operación que también supuso la división del grupo en tres empresas diferentes: Panrico, Artiach y la Bella Easo.

Para dibujar la nueva ruta estratégica de la compañía, Vilas estará acompañado en el consejo por Jaime Carbó (director general de Ebro Puleva), Jack Keenan (CEO Grand Cru Consulting), Yiannis Petrides (ex presidente y CEO de Europa Pepsi Bottling Group), José Maria Vara (CEO Festa) y Karim Khairallah (Managing Director de Oaktree Capital), como consejeros. Cerrará la cúpula directiva Miguel Trías, socio de Cuatrecasas, como secretario.

Reforzar presencia

A pesar que desde Panrico se han negado a hacer declaraciones a este medio, los cambios apuntan a un intento de reforzar la presencia de las marcas que se incluyen en el negocio de alimentación (desde Donuts a las galletas Chiquilín) tanto en sus mercados de referencia principales, España y Portugal, como más allá de la península.

Y es que también se ha reforzado el equipo gestor con la incorporación de Jorge Folch como director de márketing, Iban Solé en la dirección de ventas, Luís Sobreroca en ventas industriales y Jordi Damiá en tecnologías y procesos.