Orange planta cara a Telefónica: no sube precios, aunque quita las grandes promociones
Los operadores de telefonía entran en un terreno desconocido, ahora tendrán que afrontar la 'guerra comercial' sin promociones por derribo
Orange busca aclarar su futuro frente a los nubarrones que asolan al sector de las telecomunicaciones. Desde hace meses la inflación mete presión a un mercado que, debido a la ‘guerra de tarifas’, ha tirado los precios. Y el resultado de esa ecuación ha golpeado la rentabilidad. En este contexto, unos suben precios, otros los mantienen; y las promociones se evaporan.
Con todos estos condicionantes, el operador naranja ha movido su primera pieza: no subirá los precios. Así lo confirmó hace unos días el CEO de Orange España, Jean-François Fallacher. Fue en el marco de un foro organizado por UGT. Y el máximo responsable de la filial española fue rotundo. Al menos, toda la rotundidad que otorga una situación macroeconómica tan cambiante.
Por eso, el “no subiremos los precios” se recuesta sobre un “en estos momentos” que, al menos, sirve para lanzar un mensaje a los potenciales clientes. Y es que, en la ‘guerra comercial’, hay que utilizar todos los recursos para conseguir captar a nuevos clientes. O, al menos, su atención.
De esta forma, Orange ha conseguido trasladar el mensaje de que no subirá los precios. Pero, tal y como ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL, esta situación irá en paralelo con la eliminación de grandes promociones. Al menos, aquellas que precisamente han acentuados esas guerras comerciales que han erosionado los márgenes.
Esta estrategia, no obstante, no es nueva en el seno del operador naranja. Desde hace tiempo, la compañía ha resaltado en sus comparecencias públicas que no era muy partidario de sobrecalentar el mercado con promociones agresivas y ofertas muy temporales para captar nuevos clientes. Esas palabras -posteriormente-, se saciaban con agua de borrajas, y al final Orange ha terminado entrando en dichas peleas. Sobre todo, lo ha hecho a través de sus marcas ‘low cost’, como hacen todas las compañías. Aunque ahora parece que por fin ha cambiado.
Orange se desmarca de Telefónica
Estos movimientos de Orange se producen en respuesta a Telefónica. Y es que Movistar subirá sus precios en España un 6,8% de media a partir de enero, debido a los costes crecientes de la prestación del servicio.
El operador azul notificará por carta a sus clientes en los próximos días el nuevo precio de su factura en el próximo año, ya que la nueva estructura de tarifas de MiMovistar apuesta por la flexibilidad a la hora de escoger paquetes, con lo que cada subida será personalizada.
El aumento de costes es una de las tres razones que se reserva Telefónica para subir precios en sus contratos, junto a la inflación y cambios normativos. El aumento de precio, quedaría así por debajo de la inflación de los últimos 12 meses. Así, una tarifa que incluye un paquete de conectividad, la televisión básica de Movistar y el fútbol experimentará una subida del 5,6%, mientras que el módulo de fútbol costará dos euros más al mes a partir de enero.
En cuanto a los demás operadores, Vodafone lo que hará será una revisión de sus precios ajustados al IPC. Esto se traduce, en un lenguaje más sencillo, en una subida de precios. Esta reordenación de tarifas no se aplicará en Lowi, su marca de bajo coste, que servirá para seguir captando clientes.
En cuanto a MásMóvil, el futuro socio de Orange en la fusión que está en fase de análisis, también ha trascendido que algunas de sus tarifas tendrán revisión de precios, aunque sería casos excepcionales.