Los bajos precios de internet en España con respecto a Europa dan un respiro a la fusión Orange-MásMóvil

Los dos operadores españoles están pendientes de la resolución de la Comisión Europea para conocer si habrá condiciones en su fusión, aunque juegan con importantes bazas a favor

Orange

El CEO de Orange, Ludovic Pech, junto a directivos del operador

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Orange España y MásMóvil encaran la fase final de su fusión, al menos en lo que respecta al escollo europeo que deben salvar para su validación. Y la calma está siendo más tensa de lo esperado, puesto que Bruselas señaló de manera clara la posibilidad de que surjan problemas de competencia y precios. Aunque los españoles, en concreto, son de los europeos más afortunados. 

Para finales de septiembre o principios de octubre se espera que la Comisión Europea (CE) dicte sentencia sobre la fusión entre Orange y MásMóvil. Debe pronunciarse sobre la necesidad o no de exigir ciertas acciones para validar la operación. Todo ello, porque dentro del sector se asume que el veto es una opción remota

Pero el camino no ha sido sencillo. Hace unas semanas Bruselas emitió una valoración sobre el proceso. Asumía que la fusión no supondría problemas para el mercado mayorista, cosa que el regulador español no lo tiene tan claro; aunque mostraba preocupación por la competencia y su potencial tendencia a un aumento de precios.

Eso es algo que siempre ha sobrevolado la fusión entre Orange y MásMóvil. Sobre todo, porque su acumulación de clientes será importante: entre la ‘joint-venture’ resultante y Telefónica tendrán el 70% del mercado entre banda ancha fija y móvil.

No obstante, desde hace semanas recorre un fuerte optimismo por ambas sedes. Asumen que lo importante que valoran desde Bruselas no es, precisamente, la cuota de mercado resultante, sino la capacidad que tendrán nuevos actores de entrar a competir. Y, en ese sentido, se frotan las manos con la evolución que están teniendo compañías como Avatel o Finetwork y, por encima de todas, el tsunami comercial que supone Digi. Pero hay más motivos para el optimismo. 

Orange, MásMóvil y los precios 

En este contexto de espera, Orange y MásMóvil cuentan con algunos factores positivos a su favor ante estas dudas de la CE. En un reciente informe de Bloomberg Intelligence al que ha tenido acceso ECONOMÍA DIGITAL, explican que tras un estudio llevado a cabo sobre los precios de los servicios de telecomunicaciones en Europa, nuestro país se encuentra de mitad de tabla para abajo

Así, concluyen que estos precios deberían dar un respiro a las preocupaciones de Orange y MásMóvil, puesto que países como Francia o Alemania tienen presiones de costes más altas en el sector de las telecomunicaciones. 

Un negocio con precios a la baja 

La inflación no va con las telecos. Pese a lo que pueda parecer; sobre todo, tras las subidas que afrontaron la mayoría de compañías a principio de año, la realidad del sector es que llevan casi una década con las facturas a la baja, o apenas ajustadas al IPC. Eso es algo que los operadores de telefonía notan en sus balances, donde la rentabilidad lleva años menguando.  

Telefónica, Orange, Vodafone y MásMóvil siempre han mantenido el mismo discurso: que sus precios, aparejados a los servicios que ofrecen, tienen unos de los costes más ajustados de la Unión Europea -y razón no les falta-. El problema, principalmente de imagen, es que suele haber subidas de precios para algunas tarifas que despeñan ese mensaje. Pero las cifras son distintas -y tozudas-.  

En concreto, según datos del último Panel de Hogares de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en el año 2014 el coste medio de los consumidores en los paquetes cuádruples, con telefonía fija, internet y móvil, se situaba en 46,1€. Si ponemos la lupa en las últimas cifras, que corresponden al segundo semestre de 2022, ese gasto se queda en 45€.  

Es decir, en casi los últimos 10 años los precios no han variado. Es cierto que en 2017 este tipo de paquetes llegaron a subir hasta los 54€ por consumidor, pero desde entonces ha habido un descenso continuado. Algo que se ha visto más pronunciado desde la salida de la pandemia provocada por el covid, donde la ‘guerra de tarifas’ ha impulsado a la baja.    

Esta situación se refleja de manera similar en los paquetes quíntuples, que son los que además de todos los servicios de telefonía incluyen la televisión. Aquí sí es cierto que, según los datos de la CNMC, el precio medio ha subido en la última década. En concreto, ha pasado de 70€ en 2014 a los 79,6€ actuales, y con un máximo de 81€ que se alcanzó justo antes de la llegada del covid.  

En este caso, la subida no refleja el alza en el coste de la vida que, además, se ha visto muy pronunciada en los últimos dos años. Asimismo, en estos servicios de televisión hay que añadir el gasto que han tenido que afrontar los operadores de telefonía en derechos; sobre todo, Telefónica y Orange, y que en realidad no se ha traslado de manera similar. 

Raúl Masa

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