Nostrum revisa su acuerdo la banca y ya vislumbra la luz
Home Meal asegura que tiene un pacto con el 88% de los acreedores al que se agarra para abandonar el preconcurso de acreedores
Tras verse obligada a declararse en preconcurso de acreedores, Home Meal Replacement ya vislumbra una salida para su delicada situación financiera. La propietaria de la cadena de restauración Nostrum anunció este martes que llegó a un nuevo acuerdo con sus acreedores para refinanciar una deuda que ronda los 10 millones de euros.
En un comunicado enviado al regulador bursátil, la cotizada en el MAB explicó que el nuevo pacto alcanza el 88,16% del pasivo entre los bancos y los tenedores de pagarés y bonos en Luxemburgo. “Los acreedores disponen de hasta el 28 de diciembre para concretar los detalles de la refinanciación”, señaló.
Una vez se ratifique el pacto, la compañía buscará que se ratifique en los juzgados, lo que le permitirá abandonar el preconcurso. «Con la firma del acuerdo, Home Meal Replacement ha realizado un paso crucial para conseguir que en las próximas semanas el acuerdo quede homologado judicialmente y permita a la sociedad continuar desarrollando y potenciando el negocio a nivel nacional e internacional con paso firme», presume la sociedad.
El segundo acuerdo de Home Meal con la banca
La compañía dirigida por Quirze Salomó ya anunció un viernes de septiembre por la tarde un principio de acuerdo con BBVA, Targobank, Banc Sabadell, Ibercaja, Banco Santander, Bankia, Banco Popular, Bankinter y Caja Mar para refinanciar la deuda actual a seis años con un ejercicio de carencia.
Para su entrada en vigor, la banca puso como condición que los tenedores de 6,3 millones de euros en pagarés se sumen a la firma además de la unanimidad entre todas las entidades. En manos de la española QRenta y Credit Suisse, la deuda también debía ser aplazada ante la imposibilidad de la empresa por abonarla. El pasivo bancario alcanzaba los 3,7 millones. No obstante, quedaron fuera de la negociación los proveedores, con una deuda similar a la de los bancos.
Sin embargo, todo saltó por los aires cuando Ibercaja se desmarcó a última hora de un acuerdo que parecía cerrado. La cotizada en el Mercado Alternativo Bursátil respondió declarando el preconcurso de acreedores y ganar así tres meses más para negociar con sus acreedores.
El grupo cerró el año 2017 con unos números rojos de 3,4 millones de euros frente a las pérdidas de 1,5 millones del 2016. Sí logró incrementar los ingresos el 5% hasta los 15,2 millones de euros. El pasivo total ascendió en 2017 desde los 19,6 millones hasta los 26,4 millones de euros.