Nissan Barcelona: todo pendiente de la dirección de Japón
Sindicatos y dirección firman el acuerdo para salvar 'in extremis' el nuevo turismo
Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO), Unión General de Trabajadores (UGT) y la dirección de Nissan Iberia han alcanzado el ansiado acuerdo de viabilidad de la planta de Zona Franca (Barcelona) este martes. Tras intensos encuentros entre la Generalitat con sindicatos y empresa, por fin han firmado un acuerdo que recuperaría la adjudicación del nuevo turismo a partir de 2014.
Pese a la aprobación del plan consensuado entre empresa y sindicatos, fuentes de la compañía aseguran que, aunque hoy CCOO y UGT ratifiquen el acuerdo, la decisión final dependerá de la dirección en Japón. Por ello apuntan que firmar el acuerdo no adjudica de facto el nuevo turismo.
Puntos acordados
La propuesta que ha recibido la aprobación de la empresa garantiza el empleo para los trabajadores con contrato indefinido así como la creación de una comisión de seguimiento que velará por la compensación en formación de los nuevos trabajadores que cobrarán un 20% menos que sus compañeros antiguos, tal y como aprobaron CCOO y UGT el pasado sábado en asamblea.
Este punto ha sido una de los principales logros de los sindicatos, que pedían conservar las condiciones de los trabajadores actuales y minimizar los efectos del plan empresarial para las próximas incorporaciones.
El acuerdo también contempla que el comie de empresa tendrá que acordar cualquier incremento de saturaciones de líneas, evitando la aplicación automática que pedía la empresa, según indican ambos sindicatos.
Últimos avances
Desde este lunes, los sindicatos han intensificado los encuentros con la Generalitat como mediadora para salvar la inversión de 130 millones y los 1.000 puestos de trabajo directos en juego. El pasado sábado, CCOO y UGT aprobaron con sus afiliados un plan de viabilidad alternativo al que presentó la dirección y que ratificó hace una semana el primer sindicato, Sigen-Usoc.
Ahora, la dirección asiática tendrá la última palabra, ya que no se puede decir que el coche esté adjudicado de manera definitiva a la planta catalana. El principal impedimento era la falta de un plan de competitividad que ha llegado tras seis meses de negociaciones entre ambas partes, y con la incorporación del departamento dirigido por Felip Puig en tiempo de descuento, después de que la empresa diera por truncadas las negociaciones.