Naturgy rebaja la suspensiĆ³n de empleos de su filial Nedgia
Acuerda que en vez de 300 sean 200 los empleados que estƩn parados de manera simultƔnea
Naturgy ha suavizado las condiciones planteadas el pasado 12 de septiembre para la suspensión de 300 empleos de Nedgia, su filial de distribución, una medida planteada hasta conocer el recorte definitivo de retribución a las redes de distribución de gas planteada por la CNMC. Ahora, la compañía y los sindicatos han acordado que sean 200 empleados los que estén de manera simultánea suspendidos de empleo, aunque no de sueldo.
Con este acuerdo, siempre habrá 100 empleados de los 300 afectados en sus puestos de trabajo y otros 200 parados que se irán rotando, según adelanta El Confidencial este miércoles,
Esta medida, que estará vigente hasta el 31 de diciembre y más adelante se valorará si se revisa., implica que ninguno de los afectados perderá salario o cotización a la Seguridad Social, y Naturgy no ha planteado ni un ERTE ni un ERE en la compañía.
La reducción de la actividad se aminora de esta forma un 33% respecto a la intención inicial de Naturgy, que tenía que pactar el plan con los sindicatos para poder llevarlo a cabo.
De esta forma, Naturgy opta de entrada por evitar medidas más drásticas a la espera de ver qué impacto tiene sobre su negocio la circular definitiva de la CNMC.
La compañía aseguraba que se ha visto Ā«abocada a realizar esta medida temporalĀ» a la espera ver qué decisiones se toman una vez que se conozca el texto definitivo de la CNMC.
Naturgy, pendiente de la CNMC
El hachazo propuesto por la CNMC a las empresas energéticas y gasistas ha supuesto un terremoto en el sector. Y es que Competencia ha planteado en sus proyectos de circulares para la retribución de las actividades de distribución y transporte de electricidad y gas recortes que van de media desde el 7 % al 21,8 %, en función de cada actividad, una medida que ha puesto en pie de guerra especialmente al sector del gas.
Esta medida ha causado revuelo, no solo entre las empresas afectadas, sino también en el propio seno de la entidad reguladora. Los cambios no acaban de convencer a varios consejeros, que ya trabajan en enmiendas para matizar algunos de los aspectos más polémicos de la nueva regulación, principalmente aquellos que afectan al sector del gas.
Se espera tener el proyecto aprobado a finales de 2019 o principios de 2020. Sin embargo, el camino a recorrer es aún largo. Primero, la CNMC se tiene que reunir con el Ministerio para la Transición Ecológica en la Comisión de Cooperación. Posteriormente, se debe enviar la propuesta al Consejo de Estado para que la evalúe jurídicamente. Y tras ese trámite, la CNMC debe hacer una propuesta definitiva.