Naturgy resiste en México con el ancla de 1.000M en su negocio de redes
La gasista española ha aprendido a lidar con la inestabilidad política y empresarial que se vive en el país azteca
Naturgy vive bien en México; al menos de momento. Tras los movimientos de Iberdrola en el país azteca, donde ha reducido a la máxima expresión su negocio de ciclos combinados de gas, todos los ojos buscan a la gasista española para saber qué intenciones tiene. Sobre todo, porque la situación de las empresas extranjeras en el país siempre estarán expuesta a los vaivenes ideológicos de su presidente. Aunque algunos tienen razones para quedarse.
La compañía presidida por Francisco Reynés no tiene motivos, a priori, para ejecutar un movimiento como el realizado por Iberdrola. Entre otras cosas, porque la relación de Naturgy con México tiene implicaciones más allá de lo puramente comercial. Y, además, porque se trata de uno de los principales mercados para la gasista.
Con negocios de producción eléctrica, gas y renovable, y, sobre todo, con distribución de redes, Naturgy debe sobreponerse a los giros populistas de Andrés Manuel López Obrador y mantener la calma. En concreto, el negocio de la distribución supone más de 1.000 M€, con un Ebitda de 256 M€. Teniendo en cuenta que los ingresos del país azteca ascienden a 2.056 M€, suponen más de la mitad.
Además, también hay que tener en cuenta que los activos de Naturgy, en lo que respecta a ciclos combinados, es menor que el de Iberdrola y, por lo tanto, la venta tendría menos impacto. En estos momentos, la gasista tiene unos 2.300 MW de capacidad en ciclos con un valor neto contable de 600 M€. Esta cifra la calcula la propia compañía sin el fondo de comercio, es decir, lo que se añade por la tipología de activo, reconocimiento de la marca, etc.
Bajo este escenario, y a tenor del comportamiento de Naturgy, parece poco probable que la gasista siga los pasos de Iberdrola. Y todo ello pese a que López Obrador ya ha maniobrado para imponer sus ideas a las energéticas extranjeras y, lo peor, que lo seguirá haciendo. No obstante, la compañía española posee concesiones en el negocio de las redes que oscilan entre los 5-16 años para su cumplimiento. Por lo tanto, sabe que es esencial. Y con datos lo ha justificado.
Naturgy, el gas y México
Para la industria y uso comercial, el gas natural es fundamental -tal y como se ha demostrado-. Por ello, desde que Naturgy México inició operaciones en el año de 1997, los clientes industriales y comerciales, así como residenciales, se han beneficiado, como explican desde la compañía, de un «combustible, económico, seguro, confiable y amigable con el ambiente».
Sobre esta situación, la gasista esgrime que, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los estados en donde se tiene acceso al gas natural desarrollan un PIB un 3,4% más grande en promedio si se comparan con los estados en donde no existe dicho acceso.
No es de extrañar que las entidades en donde Naturgy tienen presencia, registraron un incremento en el PIB estatal superior al 30%, siendo los estados de Nuevo León, y Aguascalientes los más destacados con incrementos de 42% y 47% respectivamente.
De esta forma, en dos décadas, las redes de distribución se han ampliado, brindando acceso a infraestructura a empresas y hogares. Como consecuencia de ello, el gas natural se volvió accesible para más de 1,5 millones de usuarios en esas regiones, según explican desde la compañía presidida por Francisco Reynés.
Además, se introdujeron sistemas de seguridad que en el caso de Naturgy llegan a 10 niveles, y, además, se transformó la atención al cliente para estar más cerca de ellos, buscando continuamente innovar para que nuestro servicio cumpla su función de ser un habilitador del bienestar para las comunidades a través del desarrollo económico vinculado al acceso a este energético.