Naturgy hará 17.000 test a todos sus empleados y sus familias
El proyecto de la empresa durará más de tres meses y permitirá volver al trabajo a sus empleados, según la edad y la vulnerabilidad, de forma escalonada
Naturgy —la primera distribuidora de gas en España y la tercera eléctrica— concreta su plan de desconfinamiento mediante el cual va a realizar un total de 17.000 pruebas para detectar el coronavirus. Las pruebas no solo se repartirán entre los empleados, sino que también se realizarán a sus familias (6.000 para los trabajadores y 11.000 para sus familiares).
La empresa se convierte así en la primera gran energética en diseñar un plan de desescalada de las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno. El estado de alarma todavía permanecerá al menos hasta el día 10 de mayo, pero las empresas se encuentran ya diseñando planes para que puedan ser efectivos a partir de esa fecha, como también ha comunicado Telefónica.
Naturgy forma parte de las empresas consideradas como servicios esenciales y, por lo tanto, ha podido operar plenamente durante todo el confinamiento. Su trabajo ha resultado clave a la hora de abastecer a los hospitales y otros centros estratégicos. Pero, por responsabilidad con la seguridad de sus empleados, la empresa aplica medidas de teletrabajo allá donde es posible. De esta manera, más del 70% de todos sus empleados ha trabajado en remoto.
Aunque no ha sido posible aplicarlo en todas las áreas operativas, teniendo en cuenta que se necesita el mantenimiento físico de las instalaciones. La empresa empezará a distribuir y realizar los test a partir de el próximo lunes 27 de abril. Para poder abastecerse se ha coordinado con las autoridades sanitarias.
El desconfinamiento consta de cuatro fases
Según el comunicado de la empresa donde concreta el plan de desconfinamiento, se hará un «retorno escalonado por colectivos y por fases al trabajo normal». También asegura la «aplicación de las medidas de prevención, higiénicas y de seguridad necesarias tanto para garantizar un retorno seguro al centro de trabajo, como en el ámbito personal».
También acotará a no más de 30 personas las reuniones funcionales y eventos internos presenciales, limitando el aforo de las salas a la mitad del establecido normalmente. Los eventos con carácter presencial se limitarán a únicamente los «imprescindibles, justificados» y se tendrá en cuenta si los trabajadores tienen un largo recorrido en avión o tren para llegar a su puesto de trabajo, priorizando aquellos que lo tengan más cerca.
La desescalada tendrá cuatro fases, dependiendo de los colectivos clasificados por edad y vulnerabilidad ante el coronavirus. Durante los tres primeros meses después de levantarse el estado de alarma, volverán los empleados inmunes. Y los últimos en reincorporarse serán las personas más sensibles y los mayores de 60 años sin inmunidad.