Naturgy dispara beneficios gracias al acuerdo con Egipto
La energética española registra un beneficio de 484 millones de euros en el primer semestre, un 45% más que en 2020
Naturgy ha cerrado el primer semestre del 2021 con un beneficio neto de 484 millones de euros, lo que supone un incremento del 44,9% con respecto al mismo periodo del año anterior. Esta mejora está marcada por la inyección económica que la compañía ha recibido de Egipto tras resolver la disputa que afectaba a Unión Fenosa Gas (UFG) desde el año 2012.
La energética que preside Francisco Reynés llegó a un acuerdo amistoso con la energética italiana Eni y con el Gobierno de Egipto en marzo para terminar con este enfrentamiento, a cambio de una contraprestación de 500 millones de euros en efectivo y en activos, que han permitido maquillar las cuentas.
Como resultado de esta operación, la compañía participada por La Caixa, GIP y CVC se ha anotado unas plusvalías de 103 millones de euros, mientras que los activos de UFG asignados a Naturgy se han consolidado al 100%, según ha informado la compañía en sus resultados del segundo trimestre.
Naturgy también se ha beneficiado del incremento de la demanda energética en España que ha disparado sus ventas un 17,3% durante el primer tramo del 2021. Un momento marcado por el fuerte debate social sobre el precio de la luz, que ha llevado incluso a mover ficha al Gobierno de Pedro Sánchez con cambios en la factura eléctrica y su carga fiscal.
Este impulso económico ha permitido a la energética compensar los gastos de más de 209 millones de euros que ha acarreado su plan de reestructuración, que permitirá dar salida a 800 trabajadores en España de manera voluntaria a lo largo del año. Cerca de 600 han abandonado ya su puesto en el mes de julio.
Los beneficios de Naturgy están por debajo de los datos prepandemia
El beneficio neto ordinario del grupo ha alcanzado los 557 millones de euros en el mes de junio, lo que representa un 17% más que el mismo mes de 2020, tras la declaración del primer estado de alarma en España. Sin embargo, las cifras aún están un 20% por debajo de los datos del 2019 cuando todavía no había comenzado la crisis sanitaria y económica del coronavirus.
A pesar de esta mejoría el resultado bruto de explotación (ebitda) se ha situado en los 1.678 millones de euros en el segundo trimestre, lo que supone una caída del 3,8% con respecto al mismo periodo de 2020.
La deuda del grupo a mitad del año ha alcanzado los 13.611 millones de euros, unas cifras equivalentes a las que protagonizó la compañía en el cierre del 2020. El monto esta condicionado por el pago del dividendo de 611 millones de euros correspondiente al año anterior.
Como resultado, el ratio que compara la deuda financiera neta con el ebitda se ha situado en los cuatro puntos, una décima más que en el último balance de diciembre de 2020.
Naturgy cambia la cara de las cuentas en plena incertidumbre por la OPA
Los resultados han llegado en un momento convulso para la compañía presidida por Reynés que todavía está pendiente de la OPA que anunció el fondo australiano IFM en enero para hacerse con el 22,79% de su capital.
En plena incertidumbre sobre el futuro de la energética, las inversiones han alcanzado los 439 millones de euros, lo que supone un retroceso del 20,5% con respecto al año anterior.
El 28 de julio es la fecha marcada en rojo en el calendario. Además de la publicación de los resultados, la energética también presentará su nuevo plan estratégico que marcará la hoja de ruta hasta el año 2025. El proyecto quedó aplazado en febrero por la oferta de IFM.
El documento remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ya ha adelantado que esta nueva etapa estará marcada por «la transición energética y el crecimiento en renovables y redes de distribución, así como en el desarrollo de nuevas energías».
Precisamente, en el último semestre Naturgy centró su apuesta en proyectos de renovables en España, Chile y Australia con la ampliación de su red. Mientras que se adjudico nuevas subastas solares en territorios clave como Canarias, que le permitirán duplicar su capacidad instalada en esa comunidad autónoma.