Muere la esposa del joyero Esteve Rabat
Con tan sólo 54 años, Cuca Rabat ha sido víctima de una difícil enfermedad
Cuca Rabat, la esposa del joyero Esteve Rabat, ha muerto este miércoles. Con tan sólo 54 años, Rabat había sido diagnosticada de una grave enfermedad hace tan solo unos meses, algo que ha impactado enormemente a la familia.
La prestigiosa joyería catalana es una de las más importantes en España. Marcas de lujo como Pomellato, Pianegonda, DeGrisogono o Stefan Hagner, entre muchas otras copan las ventas de la casa. Asímismo, comercializan firmas de relojes de alta gama como Chopard, Audemars Piguet, Richard Mille, Tag Heuer, Chanel o Chaumet.
El entierro se celebró este jueves pasado en la parroquia Santa Maria de la Bonanova en Barcelona, rodeados de su família y amigos con gran tristeza por la notícia tan repentina. Cuca murió en el hospital donde se encontraba curandose desde hacía muy poco tiempo.
Maria Dolors Bergadà o Cuca como la llamaban sus amigos, empezó vendiendo complementos para barcos en el puerto de El Masnou, donde a los 17 años conoció al que sería su esposo Esteve Rabat. Para entonces Rabat trabajaba en el negocio familiar dedicado al sector de la construcción.
Un conocido en común les ofreció un taller de joyería en Badalona como pago de una deuda. Cuca, tenía cierto vínculo con el mundo de la joyería por su abuela, una visionaria que solía coleccionar piezas que impresionaban por su rareza. Los primeros diseños para Rabat fueron nudos marineros, inspiración de su experiencia y vínculo con el mundo de la náutica.
Esteve Rabat siempre defendió que la joyería funcionaba gracias al espíritu y buen gusto de Cuca, dotada de gran sensibilidad por el diseño y la visión de compras. El matrimonio tuvo dos hijos, Jordi y Esteve. El primero, heredó la sutileza de su madre y la devoción por los relojes, como su padre. Hace dos años se casó con Eva Palao, modelo y arquitecta. Esteve hijo, Tito, compite en el Mundial de moto 2 que desde pequeño tuvo clara su pasión por el motor.