Moody’s avisa a Áreas: los resultados no se recuperarán hasta 2023
La agencia advierte que el tráfico aéreo continuará deprimido hasta 2022, lo que retrasará todavía más la vuelta a la normalidad del operador
La recuperación de la pandemia en forma de V hace tiempo que se dio por descartada en España. En el sector turístico, la vuelta a la normalidad todavía no tiene fecha. Y la depresión de la industria no afecta solamente a aerolíneas y hoteleras: la restauración también estará golpeada. Más si dependen del negocio en aeropuertos. En el caso de Áreas, el regreso a los niveles precoronavirus no llegará hasta 2023.
Así lo advierte Moody’s en una nota emitida la pasada semana. «El tráfico deprimido de pasajeros por aire hasta al menos 2022 dificultará la recuperación de los puntos de venta de la compañía ubicados en aeropuertos», avisa la agencia. «Esto significa que es poco probable que los ingresos y las ganancias vuelvan al nivel del ejercicio que finalizó en septiembre de 2019 antes de 2023, como muy pronto», zanja.
El descenso de las ventas no es el único dolor de cabeza para la organización controlada por el fondo PAI Partners. La agencia de calificación señala que la firma quemará efectivo durante entre 12 y 18 meses. Un problema añadido al endeudamiento que tuvo que afrontar para asegurarse liquidez durante los meses más duros de la pandemia.
No obstante, Moody’s también da señales para el optimismo. Para empezar, la diversificación de Áreas: el negocio en las estaciones de tren y áreas de servicio de autopistas se recuperará más rápido que el tráfico aeroportuario.
Además, la compañía consiguió asegurar su liquidez tras obtener 210 millones de euros en préstamos avalados por el estado, tanto el español como el italiano y el francés.
Áreas aprovechó el coronavirus para salir de compras
A pesar de las dificultades, Áreas aprovechó la pandemia para crecer a base de adquisiciones. En noviembre, la organización adquirió Autogrill a la familia Benetton por algo más de 10 millones de euros.
Con la operación, el grupo sumó aproximadamente 80 millones de facturación a los 1.900 millones en ventas que obtiene alrededor del planeta, en el que es el tercer operador de su sector.
La firma salió de compras un año después de cambiar de propietario. En 2019, el fondo de inversión PAI Partners se hizo con ella tras pagar 1.500 millones de euros a la francesa Elior.