Michelin salva sus fábricas españolas del recorte de 2.300 empleos
El grupo galo concentrará los despidos en Francia y no está previsto que afecte a los empleados de las cuatro plantas que tiene en la Península Ibérica
El plan de despidos diseñado por Michelin no pasará por España. De momento. El gigante galo de los neumáticos anunció el miércoles un ajuste de hasta 2.300 empleos en los próximos tres años: una medida que se centrará en Francia y que afectará a ligeramente más del 10% de la plantilla que el grupo tiene en el país. Las cuatro fábricas del conglomerado en la Península Ibérica respiran por ahora.
Michelin señaló que el paquete de salidas forma parte de un plan “de simplificación y competitividad” en marcha desde hace 18 meses, antes de la llegada del coronavirus. Las nuevas 2.300 bajas se sumarán a las 1.500 que ya se produjeron en 2017 y que se repartieron entre Francia, Estados Unidos y Alemania.
El fabricante de neumáticos quiere incrementar su productividad en un 5% anual con el recorte de costes, que no acarreará el cierre de ninguna fábrica. El proyecto supondrá la eliminación de 1.200 puestos industriales y otras 1.100 plazas administrativas. No se esperan despidos traumáticos: la empresa quiere cubrir el cupo con un 60% de prejubilaciones y un 40% de bajas incentivadas.
España se libra
Fuentes de Michelin en España explican a Economía Digital que el recorte se concentrará en Francia y no está previsto que afecte a los centros que el grupo tiene en el país, en Lasarte (Guipúzcoa), Vitoria (Álava), Aranda de Duero (Burgos) y Valladolid. Sin embargo, no cerraron la puerta a que futuros ajustes sí golpeen el empleo en las fábricas de la Península Ibérica.
Además de las instalaciones productivas, la organización también tiene un centro de experiencias en Almería mientras que el personal de oficinas se reparte entre Tres Cantos (Madrid), Illescas (Toledo) y Portugal.
El último contratiempo que la empresa tuvo que afrontar en el país fue el cierre de su operativa por culpa de la primera oleada de la pandemia. Como ya explicó este medio, el grupo cerró sus plantas –con el consecuente expediente de regulación temporal de empleo (ERTE)– y envío a teletrabajar a los trabajadores que desempeñaban tareas administrativas.
Michelin: un recorte temporal
Según explicó el presidente de Michelin, Florent Menegaux, en una entrevista concedida a Le Figaro, la intención de la cotizada es que los empleos destruidos se recuperen en los próximos años en nuevas áreas con mayor potencial, como la elaboración de neumáticos premium, el reciclaje de plástico y los proyectos renovables en los que está inmersa.
La firma pretende que el 30% de sus ingresos no proceda del negocio de los neumáticos en 2030.