Los Miarnau acicalan su filial de renovables para la venta
La familia Miarnau regulariza los números de Comsa Renovables, una de las empresas que debe vender por exigencia de los bancos
El compromiso entre los Miarnau y la banca comienza a desmembrar Comsa. El grupo de infraestructuras obtuvo el sí de los bancos para refinanciar una deuda de 719 millones a cambio de vender buen parte de sus filiales hace un año. Por ello, ahora adereza la situación contable de las empresas con tal de facilitar la transacción. La primera: Comsa Renovables.
Fuentes del grupo explican a Economía Digital que la empresa tuvo que acudir al rescate de la sociedad hace unas semanas al encontrarse en causa de disolución. La firma tenía fondos propios negativos, por lo que tuvo que realizar una reducción de capital de 8,8 millones para igualarlos con el capital social, de 25 millones frente a los 16,1 de este capítulo. “Es una exigencia del registro mercantil”, señalan.
Además, el conglomerado de las familias Miarnau y Sumarroca también se vio obligado a modificar la forma jurídica de la empresa. “Por obligación contractual dentro del proceso de refinanciación”, Comsa Renovables tuvo que pasar de ser una sociedad limitada a una sociedad anónima.
La filial de energía es parte de un paquete de desinversiones de 200 millones de euros para pagar las deudas del grupo. Con el objetivo de centrarse en el negocio de las infraestructuras y las ingenierías, la empresa también se encuentra en trámites de vender sus concesiones. No obstante, la familia Carbonell torpedeó la operación.
Además de Comsa Renovables, los Miarnau también están inmersos en la venta de sus concesiones
Comsa planeaba vender la totalidad de las concesiones al fondo de inversión Mirova. Entre ellas estaba su participación en Cedinsa (22%), que agrupa carreteras como el Eix Transversal y el Eix del Llobregat. Cuando el acuerdo parecía inminente, Copcisa (22%) –de la familia Carbonell– se entrometió al tratar de comprar el paquete de los Miarnau sobre el que tenía un derecho preferencial.
La concesión más valiosa quedaba fuera del paquete y la venta perdía interés, por lo que el contraataque se produjo a las pocas semanas: anunció con la intención de comprar el 34% de Cedinsa en manos de FCC. La única que se mantenía ajena a la guerra era Copisa y su 22%.
Desde entonces, ambas ya se han advertido mutuamente de que cualquier oferta formal se impugnará. A pesar de que todavía no se ha llegado a los tribunales, el enfrentamiento sí tendrá consecuencias. La venta de Cedinsa estaba prevista para el mes de enero y se retrasará, como mínimo, hasta abril, señalan fuentes inmersas en el proceso.
La refinanciación de Comsa
Comsa cerró en diciembre de 2016 una refinanciación de 719 millones de euros con ocho bancos: Santander, Caixabank, Bankia, Banc Sabadell, BBVA, Banco Popular, Bankinter y Unicaja. Dentro de los acuerdos alcanzados, se firmó la venta de «activos no estratégicos» por valor de 200 millones de euros. Anteriormente, el grupo ya se había deshecho de las filiales Aritex y CLD.
Además de un aplazamiento en los pagos, el pacto incluye un tramo de deuda de 250 millones de euros que podría cambiarse por el 50% del capital de la empresa en 2021.