Merlin Properties: Ismael Clemente resiste el órdago de Banco Santander
El consejo de administración convocado de urgencia aprueba iniciar un "proceso de reforma de la gobernanza" para rediseñar los equilibrios en la socimi
Tras más de dos horas de reunión, el consejo de administración de Merlin Properties salvó a su consejero delegado, Ismael Clemente, del pulso que el gestor mantenía de manera abierta con el primer accionista de la compañía, Banco Santander (22%). A pesar de lo esperado, el fundador de la socimi española resistió las presiones de la entidad, que cuenta con tres asientos en el consejo y tiene como presidente a un hombre de su confianza, Javier Garcia-Carranza.
La cotizada convocó de urgencia un consejo para abordar la continuidad de su fundador en el cargo de consejero delegado. Clemente no fue cesado, aunque la empresa informó en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que acordó «por unanimidad» iniciar «un proceso de reforma de la gobernanza, con el objetivo de mejorar la misma». No se precisó en qué consistirá esta reforma.
Además, presidente y consejero delegado expresaron «su respeto mutuo» en la misma nota. A pesar de los reproches salidos desde ambos bandos, Garcia-Carranza y Clemente trataron de aparentar normalidad en sus relaciones.
La decisión de mantener a Clemente fue votada por los 13 miembros del consejo de administración, siete de ellos independientes. Banco Santander, el principal crítico del directivo, cuenta con tres asientos: García-Carranza, vicepresidente del banco, Francisca Ortega e Ignacio Gil-Casares.
Fuentes financieras justificaron el relevo a Economía Digital por la voluntad de «profesionalizar el gobierno corporativo» de la Ibex y rebajar el sueldo de Clemente. Otras voces responden que la fiscalización por parte de la entidad se había disparado en los últimos meses y que el equipo directivo, por ejemplo, no podía ni siquiera aprobar una inversión sin pasar por el órgano.
Después de la entidad liderada por Ana Botín, el segundo accionista de la cotizada es Nortia Capital (8%), el fondo de inversión propiedad de Manuel Lao, el histórico dueño de Cirsa. Tiene un asiento en el consejo, ocupado por Ana Forner. Según las voces consultadas, mantuvo una posición tibia en el enfrentamiento entre el banco y el equipo gestor de la compañía.
El resto del consejo de administración lo forman Clemente, Miguel Ollero (director corporativo) y siete independientes: Fernando Ortiz, Donald Johnston, María Luisa Jordá, Ana García Fau, Pilar Cavero, Juan María Aguirre y Emilio Novela.
La directiva de Merlin respalda a Clemente
En pleno órdago del Santander, la directiva de Merlin Properties remitió una carta firmada por 185 de los 220 empleados de la empresa que expresaba “apoyo incondicional” a Clemente y denunciaron el “feudalismo” de accionistas minoritarios, en alusión al Banco de Santander.
En un manifiesto bajo el titulo “No al feudalismo corporativo”, toda la directiva y 185 empleados de la compañía denunciaron los “comportamientos abusivos y feudales por parte de accionistas minoritarios que pretenden ejercer el control mayoritario hurtando al resto de accionistas su participación en la toma de decisiones, ahorrándose de esta forma el pago de la prima correspondiente”.
“Si algún accionista desea controlar Merlin habrá de formular la correspondiente oferta pública y pagar al resto de accionistas el valor justo de mercado”, advertían , y aseguran que el equipo directivo “velará por los intereses de la sociedad hasta el final, con el apoyo de la plantilla” y que “no cederán ante el abuso”.