Meliá señala a Barcelona como su peor destino hasta marzo a causa del Mobile
La hotelera no ha empezado a observar muestras de recuperación en la ciudad condal hasta entrado marzo, mientras que la mayoría de destinos lo hacían en febrero
Los hoteles de Meliá en España cierran el primer trimestre del año con una ocupación del 46%, una cifra que todavía sigue por debajo de la de 2019, el último año antes de la pandemia, cuando la ocupación alcanzó el 61,6% en el mismo periodo. La cadena que dirige Gabriel Escarrer está teniendo una mejor recuperación en los destinos urbanos que vacacionales en el inicio de 2022, pero se le resiste Barcelona.
El grupo revela que ha sido el destino “más penalizado” entre enero y marzo, afectado principalmente por un Mobile World Congress a medio gas, con cancelaciones y aforos limitados. De hecho, señala que no han empezado a observar muestras de recuperación en la ciudad condal hasta ya entrado marzo, mientras que la mayoría de destinos donde están presentes lo hacían a mediados de febrero.
El Mobile World Congress de este 2022 se celebró entre los días 28 de febrero y 3 de marzo, coincidiendo con un aumento internacional del número de contagios por covid-19 a consecuencia de la variante ómicron, lo que provocó que algunas marcas se bajaran del barco y optaran por el formato virtual, otras ni si quiera eso.
Meliá reconoce que a Madrid también le está costando recuperar en la primera parte del año, sobre todo los hoteles menos céntricos, donde el turismo de negocio ha tardado en llegar. Sevilla, sin embargo, es la ciudad que más rápido ha recuperado el turismo de reuniones, incentivos, conferencias y exposiciones (MICE) así como algunas operaciones de Corporate y eventos deportivos, apunta la firma.
En este contexto, la empresa del Ibex 35 explica que, dentro de los hoteles urbanos, los destinos secundarios se han comportado mejor ya que son los más versátiles para generar ocio, negocio y turismo de proximidad. Los hoteles vacacionales por su parte, han tenido un peor comportamiento en el primer trimestre de este 2022 que en el de 2019 por el freno de ventas producido por la última ola de contagios y por las nuevas restricciones de viajes implementadas en Europa y Reino Unido hasta mediados de febrero.
Con todo, Meliá ha obtenido un RevPAR (ingresos por habitación disponible) de 48 euros en España frente a los 58,7 euros del año antes del Covid-19. La cadena sigue en números rojos y en el primer trimestre perdió 59,3 millones, una cifra que pese a ser la mitad que el año pasado, sigue lejos del beneficio de 2019, que alcanzó los 11,5 millones.
La empresa que dirige Gabriel Escarrer acusa a ómicron, e incluso al conflicto en Ucrania en algunos mercados, del retraso en de esta recuperación y confía en los grandes eventos deportivos del segundo trimestre para mejorar sus cifras.
Meliá fía la recuperación en Europa a la Champions y Wimbledon
El grupo hotelero tiene su esperanza depositada en grandes eventos multitudinarios. En Reino Unido, por ejemplo, el mes de abril se ha visto afectado por la limitada demanda de viajes de negocios debido a las vacaciones escolares de Semana Santa junto con la celebración del Ramadán, explican. Pero esperan que mayo y junio sean meses de alta demanda, en los que se celebran varios eventos especiales como Queen’s Jubilee o Wimbledon.
En Francia esperan incluso alcanzar cifras similares a las de 2019 gracias a la Semana Santa, la final de la UEFA Champions League en París y la recuperación de congresos internacionales. Dentro de Italia, añaden, Milán ya ha confirmado que va a celebrar todas las ferias y congresos importantes, y Alemania recupera este segundo trimestre algunas ferias que se habían pospuesto.
Asimismo, la presencia de congresos y eventos más internacionales en España les hacen ser más positivos para este segundo trimestre. Y en el ámbito vacacional, aseguran que los niveles de reservas en libros ya son similares a los del 2019, donde destaca el pick-up de último minuto.
Impacto por la guerra de Ucrania en República Dominicana y Cuba
El grupo hotelero revela que el conflicto entre Rusia y Ucrania no ha afectado de manera relevante en sus reservas. La emisión de viajeros se ralentizó en algunos destinos al comenzar el conflicto, pero se recuperó a los pocos días, añaden.
En República Dominicana, el estallido de la guerra en Ucrania desencadenó una oleada de cancelaciones en el destino y provocó también un desplazando reservas de marzo hacia los meses estivales. Este entorno provocó un descenso de tarifas generalizado para recuperar volumen a través de otros mercados, como el canadiense.
Así, el RevPAR ha sido de 85,4 euros frente a los 100,1 de antes de la pandemia. La estrategia la cadena, detallan, fue mantener niveles de tarifa y evitar entrar en una guerra de precios, lo que se reflejó en una detracción del volumen de estancias en el mes de marzo.
En Cuba, donde la ocupación solo ha sido del 32,1% frente al 64,8% de 2019, prevén poder compensar la desaparición del mercado ruso – que a consecuencia de las sanciones por la guerra de Ucrania no puede viajar- con la relajación de medidas sanitarias que han anunciado las autoridades del país a partir abril para poder entrar en el país.