Mediaset: años de altos sueldos que enfurecen a sus accionistas

Mediaset, el grupo audiovisual líder en audiencia en España, está a la espera de que sus accionistas den el visto bueno a la fusión con su negocio en Italia, una operación trascendental en el futuro de la compañía. Pero en los últimos años, a sus inversores (salvando a la familia Berlusconi) les ha preocupado un aspecto que consideran que no se ha corregido suficiente: el sueldo de sus directivos.

Mediaset es actualmente una de las empresas del IBEX que más rechazo genera entre sus accionistas cuando toca aprobar los salarios de sus directivos. Es la tercera compañía del gran selectivo en ocupar este peculiar ranking, solo superada por Melià y Ence, aunque las tres están muy parejas. Y ya van varios años con el conflicto, que sigue enquistado.

La junta general de accionistas de este año, celebrada en abril, fue la última muestra de esta situación, que se repite de manera parecida en su rival Atresmedia. El informe de remuneraciones de los consejeros de la compañía fue rechazado por el 21,049% de los accionistas y la propuesta para establecer un sistema de retribución plurianual para consejeros y directivos del grupo fue rechazada por el 16,81%. 

La junta del pasado año, en la que se sometía a prueba la gestión de la compañía en 2017, fue peor porque la política de remuneraciones de los consejeros recibió un rechazo todavía mayor: superó el 29% de los votos en contra. No obstante, en ambas ocasiones, para el ejercicio 2018 y el anterior, las propuestas recibieron luz verde, pues la familia Berlusconi tiene más de la mitad del control de las acciones.

Este rechazo es habitual que venga recomendado por los proxy advisors (asesores de voto en las juntas de accionistas), sobre todo en compañías en las que el valor de la acción no es boyante, como es el caso de Mediaset y el de toda la televisión en abierto en España: el propietario de Telecinco se ha dejado casi la mitad del valor en bolsa desde 2017.

Tampoco ha ayudado la tendencia de la industria, en la que los ingresos cada año van a la baja por la parálisis publicitaria que ha provocado el auge de las plataformas como Netflix y el cambio de hábito en los consumidores. Los datos de los últimos seis meses de la consultora Infoadex lo indica: la inversión publicitaria en televisión nacional en abierto mostró una caída del 6,0%, alcanzando los 943,7 millones de euros.

Los sueldos de la discordia en Mediaset

La pregunta parece clara: ¿cuánto perciben los altos ejecutivos de Mediaset? El informe del pasado año revela que durante el pasado año los consejeros y altos directivos del la cadena de Fuencarral percibieron 5,29 millones de euros — superó al de Atresmedia, el grupo rival, que repartió 4,31 millones de durante el mismo periodo — , pero lo cierto es que sus nóminas también acumulan recortes respecto a años anteriores.

El total de esta cantidad se reparte en tres partidas: la parte correspondieron a los miembros de la ejecutiva en concepto de retribución fija (3,53 millones), el dinero destinado en variables (1,81 millones de euros) y el resto, que corresponde a dietas (484.000 euros).

El empleado mejor pagado del grupo no fue otro que su consejero delegado, Paolo Vasile. Cobró 1,7 millones de euros, repartdos entre su sueldo (930.000 euros), remuneración fija (75.000 euros), el variable (652.000 euros) y las dietas (28.000 euros). Detrás de Vasile se situó Alejandro Echevarria como mejor pagado, con 987.000 euros, de los cuales 221.000 corresponden a variables y 56.000 a dietas. `

No obstante, uno y otro se ajustaron el cinturón respecto a 2017. Vasile pasó a cobrar un 15% menos que un año antes (300.000 euros menos), siendo ya la segunda rebaja consecutiva y pasando a cobrar menos que Silvio González, su homólogo en Atresmedia. Echevarria, por su parte, también pasó la tijera a su nómina, ya que el año anterior llegaba al millón de euros.

Pero no todos los consejeros de Mediaset sufrieron rebajas de sueldo, sino todo lo contrario. Una de las subidas las protagonizó el consejero Massimo Mussolino, que vio aumentado su nómina hasta los 892.000.El otro fue Mario Rodríguez Valderas, secretario del consejo, que aumentó su suedo hasta los 689.000 euros anuales.