Hacienda desnuda los trucos fiscales de McDonalds en España
La Audiencia Nacional se pronuncia sobre la tributación de McDonalds en España desde 2007 hasta 2010
El gigante estadounidense McDonalds lleva más de diez años enfrentándose en los tribunales con la Agencia Tributaria. Hacienda ha investigado las cuentas de la cadena de comida rápida desde el año 2005 y ha concluido sus inspecciones con sanciones millonarias al entender que la compañía se ha valido de operaciones intragrupo con una sociedad Irlandesa y otra española para terminar pagando menos Impuestos de Sociedades.
El último episodio se zanjó el pasado mes de enero. La Audiencia Nacional trataba de esclarecer si los expedientes que Hacienda abrió a McDonalds, en los que se analizaba cuánto pagó al fisco desde 2007 hasta 2010 por sus beneficios, se ajustaban a derecho.
La causa llegó a los tribunales después de que, en 2015, el Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC) avalara el acta de liquidación del Impuestos de Sociedades que Hacienda levantó a McDonalds, en la que entendió que pagó menos de lo que debía y, como corrección, le obligó a abonar 1,14 millones de euros.
Hacienda investigó a McDonalds porque sospechaba de que intentaba rebajar su factura fiscal en España por diferentes vías, como la concesión de préstamos desde su sociedad irlandesa, Golden Arches of Spain (GAOS), y la venta de equipos y otros activos desde su sociedad inmobiliaria, Restaurantes McDonalds (RMSA), a sus franquiciados, utilizando como intermediario otra sociedad, McDonalds Sistemas de España (MSE).
La sentencia de la Audiencia Nacional, a la que ha accedido Economía Digital, estimó parcialmente el recurso de McDonalds atendiendo a que este último punto, la venta de equipamiento desde RMSA a MSE, se llevó a cabo de forma correcta.
«McDonalds tiene el firme compromiso de contribuir de manera sustancial y positiva al crecimiento de la economía española y al bienestar de la sociedad. Como parte de este compromiso con nuestro país, la compañía ha satisfecho rigurosamente sus obligacionestributarias desde su llegada a España, hace más de 35 años y así lo hizo entre los años 2007 y 2010, periodo al que hace referencia la sentencia», comentan desde la compañía.
McDonalds daba préstamos dudosos desde Irlanda
Pese a la victoria aparente de McDonals, la documentación consultada revela que la mayoría de reclamaciones no fueron tenidas en cuenta, ya que la Audiencia Nacional entendió como correctas otras interpretaciones que Hacienda realizó para sancionar a la compañía americana.
La más llamativa está ligada al uso que McDonalds hizo de su sociedad irlandesa. La investigación demostró que la compañía de comida rápida utilizaba a su sociedad extranjera como prestamista de su filial española, para cobrar el crédito con intereses excesivamente altos.
¿Cuál era el objetivo? Rebajar los beneficios de la compañía española por estos elevados gastos por pago de intereses y, en cambio, anotarse esta transferencia como ingresos en las cuentas de su sociedad irlandesa, país en el que el Impuesto de Sociedades es menor que en España y que muchas multinacionales utilizan para eludir impuestos.
“La administración (Hacienda) concluye que los préstamos entre GAOS (sociedad irlandesa) y RMSA (sociedad española) no responden a lo que se habría pactado en condiciones de mercado y que por tributar una de las sociedades vinculadas a Irlanda se ha producido una tributación en España inferior a la que hubiese correspondido”, reza la sentencia.
Los bancos declinan la balanza
La Audiencia Nacional dio la razón a Hacienda después de consultar a los bancos. La investigación perseguía una serie de préstamos concedidos desde Golden Arches of Spain a Restaurantes McDonalds por importes que oscilaban entre los 10 y los 86 millones de euros a un tipo de interés de entre el 3,45% y el 6,02%.
Para probar que el tipo de interés de los créditos eran más elevados de lo habitual, la administración trató de buscar operaciones en el mercado que reunieran estas características. Tras consultar a varias entidades, éstas indicaron que no existían préstamos con las condiciones señaladas.
A la postre, utilizando la propia memoria de la compañía, se observó que durante algunos ejercicios constaba la existencia de líneas de crédito por importe de más de 100 millones de euros por tipos medios del 2,57% y otros préstamos a tipos que estaban entre el 2,75% y 3,75%.
“Desde una perspectiva de mercado no tiene sentido que se esté pagando a GAOS un tipo de interés que oscila entre el 3,45% y el 6,02%, cuando puede obtenerse a un 2,57%”, admite la sala para dar la razón a Hacienda.
Un conflicto enquistado desde 2013
El enfrentamiento judicial entre Hacienda y McDonalds lleva muchos años en los tribunales. Las primeras investigaciones del fisco y sus posteriores sanciones llegaron tras examinar las cuentas de los ejercicios de 2005 y 2006.
La compañía fue sancionada en aquella ocasión con 1,6 millones de euros. El acta fue recurrida ante el TEAC, que dio la razón a Hacienda y obligó McDonalds a elevar la causa a la Audiencia Nacional para seguir peleando.
El resultado fue el mismo que el del pasado mes de enero: la justicia daba la razón a McDonalds en uno de sus tres reclamos. En aquella ocasión, como puede suceder ahora, la compañía presentó un recurso de casación ante el Tribunal Supremo porque no estaba de acuerdo con el fallo.
No obstante, el alto tribunal ratificó la decisión de la Audiencia Nacional y desestimó el recurso de McDonalds, lo que significa que la compañía puede encontrarse con el mismo resultado si recurre la última decisión de la justicia.