Mapfre acelera las desinversiones: 250 inmuebles a la venta
Mapfre contrata a Solvia para vender solares y locales en Barcelona, Valencia y Madrid en una gran operación de desinversión de activos no estratégicos
Mapfre reconocía en su memoria de 2017 que la estrategia inmobiliaria “se focalizó en la desinversión de activos no estratégicos”. Esta estrategia se intensificó en 2018: la aseguradora española ha iniciado una gran operación de venta, con más de 250 activos con el cartel de se vende. La desinversión de materializará en el próximo año.
Según ha podido saber Economía Digital, Mapfre ha contratado a Solvia, la inmobiliaria todavía propiedad de Banc Sabadell –está a la venta y previsiblemente cambiará de manos antes de fin de año–, para que comercialice en exclusiva 256 activos inmobiliarios en España, aunque especialmente concentrados en Barcelona, Valencia y Madrid.
Los activos más importantes de esta cartera son seis solares en Madrid, Las Palmas y Mallorca, cuya venta se prevé antes de que termine este año. El resto de los activos son esencialmente locales comerciales que Mapfre posee como inversión y tiene alquilados a terceros. El plazo de desinversión es hasta el 31 de diciembre de 2019.
Los solares y oficinas que la aseguradora quiere vender se encuentran en una docena de provincias españolas. Aproximadamente la mitad están en tres CCAA: la Comunidad Valenciana, Cataluña y Madrid, aunque también en Galicia, Andalucía, Aragón y Navarra.
Consultadas por este medio, Mapfre y Solvia no han desmentido la operación y han evitado hacer comentarios. Fuentes de la aseguradora han explicado que la compañía se encuentra constantemente rotando sus activos inmobiliarios y buscando otros de más valor, aunque no han explicado si la compañía está invirtiendo por otro lado o no.
Las ventas inmobiliarias de Mapfre
Lo cierto es que ya en 2016 y 2017, Mapfre realizó desinversiones inmobiliarias importantes, y en ningún caso llegaron a los 250 activos. El año pasado, vendió inmuebles por 130 millones, la mayoría focalizados en cuatro grandes activos: un solar en Madrid por 5,5 millones, un edificio también en Madrid por 72 millones y dos parcelas en Palma de Mallorca por 22,5 millones. Con estas ventas, la compañía que preside Antonio Huertas obtuvo unas plusvalías de 65 millones de euros.
En 2016, las operaciones de salida de ladrillo se vieron claramente impactadas por la venta de una participación mayoritaria de la Torre Mapfre de Barcelona. Primero intentó venderla a un inversor que quería convertirla en un hotel de la cadena Four Seasons, pero tras no lograr los permisos por la moratoria de Ada Colau, vendió el 66% a la Fundación Mapfre por 175,4 millones y la reformó.
El riesgo inmobiliario de Mapfre roza los 3.000 millones de euros. En concreto, cerró 2017 con inmuebles con un valor de mercado de 2.945 millones, unos 170 millones menos que en 2016. Más de 1.200 millones corresponden a inmuebles de uso propio, como sus sedes y las oficinas, mientras que cerca de 1.700 millones son inversiones, entre las que se encuentra la cartera puesta a la venta por Solvia.
Solvia gana valor
Para la inmobiliaria del Sabadell es una gran operación por el volumen, pero para el banco también lo es, ya que da más valor a Solvia, que se encuentra a la venta. La entidad que preside Josep Oliu venderá el servicer, es decir, la inmobiliaria con su personal y su cartera de clientes. Como no tiene activos, lo que tiene valor son los contratos, y el de Mapfre es realmente suculento.
Se prevé que el Sabadell cierre la venta de Solvia Servicer antes de fin de año. Tres fondos han presentado ofertas, entre ellos Cerberus, que también compró sus grandes carteras de adjudicados, por entre 300 y 400 millones de euros.