Los trabajadores de Caprabo de Madrid cobran menos que los de Barcelona
En la cadena de supermercados existen convenios provinciales con tablas salariales diferentes
Trabajar en un Caprabo de Madrid o en uno de Barcelona puede notarse a final de mes. Los empleados madrileños cuentan con unos salarios mínimos que distan, en cientos de euros, de los de sus homólogos barceloneses.
Pero, ¿por qué? La respuesta se halla en el hecho de que cada provincia cuenta con un convenio laboral distinto que comporta ciertas diferencias en las tablas salariales. Mientras la plantilla de Madrid ha aprobado recientemente el convenio de alimentación que llevaba estancado años, en Barcelona se aplica el de supermercados y la disparidad puede llegar a oscilar entre los 200 y 300 euros mensuales, según apuntan fuentes sindicales.
Convenios provinciales Vs estatal
“El convenio estaba paralizado desde diciembre de 2008 y se ha firmado a finales de julio. De todos los que hay en Caprabo es uno de los peores”, matiza el portavoz de UGT en Madrid, José María Casero. Además, Eroski –actual propietario de Caprabo– cuenta con un convenio estatal que presenta varias mejorías respecto al que se ha aprobado recientemente en Madrid. “Mientras en Eroski está fijada la jornada laboral en 1.790 horas anuales, nosotros tenemos 1.810 horas”, subraya Casero.
El salario mínimo en Caprabo para la categoría profesional más baja –auxiliares administrativos, auxiliares de caja y reponedores– es, según UGT, de 680 euros al mes y supone el 80% de la plantilla. En el lado opuesto, para el mayor grupo –en el que se encuentran los directores generales– se ha fijado un salario de 1.336 euros.
No obstante, asegura Casero, los sindicatos negocian directamente con la empresa para suplir de algún modo estas diferencias con una mejor conciliación familiar-laboral.
Guerra sindical
Pero, el resto de sindicatos no piensan igual que UGT. Comisiones Obreras (CCOO) le acusa de haber aceptado algunas rebajas salarias de forma unilateral con la dirección de Caprabo. “Pese a que la compañía tiene beneficios, UGT aceptó una reestructuración de los mandos intermedios y bajar los sueldos entre un 5% y un 20%. En este último caso para los salarios más altos”, subraya Eugenio Agudo.
Del mismo modo, Fetico y CGT también se opusieron al acuerdo que firmó UGT por considerar que no era necesario dado que la compañía no ha entrado en pérdidas y sigue anotando resultados positivos.
Barcelona se planta ante un convenio equitativo
Mientras en Madrid el salario base apenas llega a los 700 euros, en los Caprabo de Barcelona “es de 989 euros” asegura Agudo. CCOO hace hincapié también en que incluso el convenio de Guadalajara disfruta de algunas ventajas frente al de Madrid como, por ejemplo, que por trabajar el sábado por la tarde se paga un plus. “Hemos propuesto a la dirección que se haga un convenio estatal, al igual que en Eroski, pero como en Barcelona están por encima en salario no apuestan por ello”, insiste Agudo.
En Catalunya, además, hay cuatro convenios distintos, uno para cada provincia (Lleida, Girona, Barcelona y Tarragona). “En la capital catalana cuentan con salarios más elevados. Primero está Barcelona y después Girona”, subraya María del Carmen Blanco de CCOO en Catalunya.
Esta brecha salarial, apuntan fuentes de UGT en Catalunya, tiene que ver directamente con el hecho de que el convenio en Madrid ha estado bloqueado más de un lustro y los salarios no se han ido actualizando. Con todo, de momento, trabajar en un Caprabo de Barcelona es una mejor opción, salarialmente hablando, que hacerlo en los supermercados de la cadena en Madrid.