Los ‘repartidores de pizza’ se plantan por su convenio
Telepizza y Domino’s retoman las reuniones con los trabajadores tras 18 meses de parón
El sector de los productos cocinados para su venta a domicilio negocia su convenio desde febrero de 2012. Pero todavía no ha llegado a un acuerdo. La principal causa es la negociación salarial entre las compañías mayoritarias y los trabajadores.
En la mesa de negociación se encuentran representantes de CCOO, UGT, Telepizza –que representa a prácticamente el 80% del sector–, y otra gran compañía, Domino’s, del Grupo Zena. También acuden pequeños repartidores, que en la mesa de negociación están representados por un abogado de Barcelona.
Justificación de las empresas
En los tres últimos años, las compañías no aplicaron el incremento salarial correspondiente a la subida del IPC justificándose en la difícil situación por la que atravesaba el mercado.
En concreto, la desviación llegó al 0,8% y según fuentes de la federación de comercio de CCOO, las empresas se comprometieron a compensar esta pérdida salarial en el próximo convenio, el que ahora está sobre la mesa.
Última reunión
Pero estas mismas fuentes sindicales consideran que no hay voluntad por parte de las principales compañías para aprobar la compensación salarial en el nuevo acuerdo laboral. O esa es la sensación con la que se fueron de la última reunión el pasado 28 de mayo.
Desde octubre de 2012 no se sentaban a negociar. Y ahora, las compañías presentes en la mesa de negociación les han pedido otros 10 días para reconsiderar la reclamación sindical.
La crisis en el sector
La organización entiende que este 0,8% que no se ha contemplado en tres años no es una suma “desmesurada y sí muy acorde a la situación actual del sector”.
Reconocen las pérdidas, consecuencia de la crisis y de la caída de la demanda de comida a domicilio. Pero también apuntan que los salarios son mínimos, ya que el 90% de los contratos son a tiempo parcial.
La federación comercial asegura que si el próximo 10 de junio, fecha en la que se volverá a sentar a negociar, no se aprueba la devolución del 0,8% de desviación salarial, tendrá que recurrir al arbitraje. No descarta otras movilizaciones si con ello si consigue recuperar la pérdida salarial de los últimos años.