Los Lara ultiman la venta de Editis tras deshacerse de la sede de Planeta
Planeta negocia con el grupo Vivendi la transacción de su negocio en Francia por 900 millones de euros
La familia Lara no descuelga el cartel de Se Vende. Si a mediados de julio se deshizo de la sede de Planeta en la Avenida Diagonal para pagar las deudas de su patrimonial, Inversiones Hemisferio, ahora es el turno de la editorial Editis, la segunda más grande de Francia, por la que esperan obtener 900 millones de euros.
Según explicó Planeta en un comunicado, existen negociaciones “en exclusiva” con el grupo de telecomunicaciones Vivendi; propietario de Canal+, Universal Music Group y Gameloft. “El resultado final está pendiente de las autorizaciones administrativas pertinentes, la due dilligence y la redacción final de los acuerdos”, detalló la empresa presidida por José Creuheras.
De este modo, el grupo editorial español perderá una firma que en 2017 perdió 750 millones de euros y generó un Ebit de 60 millones. Lo hará después de haberla adquirido en 2008 por una cifra que rondaba entre los 1.000 millones de euros, según la prensa española, y los 900 millones, según la gala.
Está integrada por más de 50 sellos editoriales que ocupan «posiciones de liderazgo» en libros de literatura, educación y de referencia y cuenta también con una importante compañía de distribución.
La operación servirá para pagar parte de una deuda de 1.300 millones de euros. Según El Confidencial, Banco Santander, BBVA, Caixabank, Banc Sabadell y Bankia refinanciaron 800 millones que vencían este año hasta 2021. También valdrá para costear inversiones en España y Latinoamérica, tanto en el negocio editorial como en el de la educación.
La segunda gran venta de los Lara en el mes
A pesar de que sea en una sociedad separada, la de Editis es la segunda gran operación que cierra la familia Lara en el mes de julio. La anterior fue la venta de la sede de Planeta en la barcelonesa Avenida Diagonal. Propiedad de Inversiones Hemisferio, cambio de manos en favor de Blackstone por 210 millones de euros.
En este caso, la cantidad ingresada servirá para pagar gran parte de la deuda que la compañía acarrea con Banc Sabadell debido a la devaluación de las acciones de la propia entidad que compró hace una década.