Los concesionarios de automóviles denuncian presiones de las marcas para automatricular coches en diciembre
Según el gremio de vendedores, los fabricantes han forzado al concesionario a 'comprarse' un 10% de los vehículos porqué no se cumplían los objetivos previstos de ventas anuales.
El 2010 ha sido muy desigual en la venta de vehículos. En los seis primeros meses, con el plan 2000E y el aumento del IVA en julio en el horizonte, el negocio iba bien. “Muy bien”, tal como describe el presidente del Gremio de Vendedores de Vehículos de Motor, Miquel Donnay, si se compara con la segunda mitad del año, cuando las operaciones cayeron en picado. Con todo, se ha conseguido cerrar con una cifra positiva en el sector: Un incremento del 4,7% en la matriculación, llegando a los 146.751 automóviles.
Pero según ha denunciado Donnay a Economía Digital, estas cifras están “enmascaradas por los fabricantes”. A lo largo de diciembre cayeron las ventas el 23,5% si se comparan con 2009 (10.757 turismos nuevos); pero según ha hecho público el presidente del gremio, las marcas obligaron a los concesionarios “a automatricular un 10% de estos vehículos para acabar el año bien clasificados, ganando sitios en los rankings de ventas, y porqué no conseguían llegar a los objetivos de ventas previstos”.
Además, ha puesto el acento en que “ya se cometió este error en 2007, cuando empezó a caer el consumo”. El resultado de entonces fue la multiplicación de stocks, un “mal que se acaba pagando caro, no es lógico”, ha añadido. Así, la realidad actual que ha dibujado Donnay en los concesionarios es el de la acumulación de vehículos kilómetro cero, a los que se les ha de sumar los de gerencia, “una presión más para el distribuidor”. Con todo, asegura que en 2011 será muy difícil “mantener el punto de equilibrio para no perder dinero”, ya que las decisiones de los fabricantes “dificultan aún más la venta de automóviles nuevos”.
2011: Cierre de concesionarios
Lo que más preocupa a los vendedores es que el mayor retroceso en las ventas “se encuentra en las operaciones a particulares”, tal como comenta Donnay, ya que en 2010 las transacciones con empresas “han subido un 68% respecto al 2009”. Al sumar “todas estas presiones”, desde el gremio esperan que durante el año que acabamos de empezar “la red de concesionarios se contraiga”.
Según su presidente, actualmente algunos fabricantes “ya están trabajando para compartir concesiones en las ciudades grandes, ya que no pueden mantener los costes de la distribución individualmente”. Siguiendo esta premisa, espera que se cierren negocios “y prevalezcan los que están fuera del área metropolitana”.
Por lo que se refiere a las previsiones de ventas, esperan que en 2011 pase lo contrario del ejercicio recién cerrado: que comience mal y vaya mejorando. “Tendremos una pérdida importante de mercado en febrero y marzo”, ha apuntado, los mejores meses del 2010. Igualmente, ha pedido al Gobierno de Zapatero “coherencia”: “Si no continua el 2000E, que les daba beneficios, por lo menos que no hablen del coche eléctrico, que no se comercializará hasta 2020”.
En este sentido ha atribuido “a criterios que van más allá de los económicos”, la suspensión de las ayudas al sector. Y es que citando «un informe que en su día enviamos a Madrid”, Donnay ha recordado que “con los impuestos que se pagan por un vehículo nuevo, el saldo final sacando los 1.000 euros de ayudas públicas aún era positivo”.