Los cárnicos justifican el fraude: «Si no vendo en negro, pierdo clientes»
Los intermediarios explican la trama en B y acusan a los restaurantes de preferir a los distribuidores que no emiten factura
Los distribuidores cárnicos salpicados por la investigación de la Agencia Tributaria comienzan a desvelar la compleja estructura que subyace detrás del fraude tributario que fue destapado por Hacienda el mes pasado.
Un distribuidor catalán que pidió mantener su nombre en el anonimato ha explicado a este diario la razón por la que se vio obligado a vender en negro a los establecimientos.
«Si no vendo en negro, pierdo clientes. Los restaurantes se quejan del coste que supone una factura con IVA. No quieren pagar IVA ni emitir facturas. Si te niegas, pierdes como un tonto porque el resto sí están dispuestos a hacerlo», explica un empresario del sector.
La rueda
Al aceptar ventas en negro, los distribuidores cárnicos también han tenido que ir seleccionando a proveedores que también les vendan en negro. De lo contrario, tendrían un perjuicio fiscal en la presentación de su declaración del IVA y del impuesto de sociedades.
La práctica del pago en B se ha extendido en el sector, pero no sólo para la compra y venta de carne sino también en toda la relación entre proveedores. «Cada vez que algún cliente paga en B, lo sabemos de inmediato, porque desde administración nos informan que no es necesario ir al banco para disponer de efectivo», explica un trabajador de una empresa en Madrid que trabaja con varios mataderos españoles.
El temor de que la investigación se extienda invade a parte de la industria. El mes pasado, la Agencia Tributaria realizó una macro-operación sorpresa que ha afectado a 80 empresas del sector en varias comunidades autónomas. El alto nivel de vida de algunos pequeños empresarios del sector disparó las alarmas de los inspectores.
La industria cuenta con unas 3.000 empresas en toda España y la patronal asegura que el fraude afecta sólo a una pequeña parte, ya que el resto del sector paga impuestos de forma escrupulosa, según han asegurado sus representantes.
Cumbre sectorial
El sector cárnico se reúne este martes en Lleida en una cumbre en la que se debatirá las consecuencias que tendrá el último informe de la Organización Mundial de la Salud, OMS, sobre el aumento de riesgo de contraer cáncer con un alto consumo de carne procesada.
Será el tema central en unas jornadas organizadas por la Asociación de Fabricantes y Distribuidores, AECOC, pero en los pasillos seguramente se hablará de otro asunto más preocupante en el corto plazo: la investigación de Hacienda que tiene a media industria temblando.