Los banqueros gallegos encarcelados tienen dinero inembargable
Los 10,4 millones que reclama la Audiencia Nacional actúan sobre las gratificaciones y prejubilaciones percibidas indebidamente por los directivos
La mejora contractual que permitió a los encarcelados exdirectivos de Novacaixagalicia embolsarse indemnizaciones millonarias a su salida de la entidad no constaba únicamente de las famosas prejubilaciones, que acabaron siendo consideradas por la Audiencia Nacional un ejercicio de administración desleal y apropiación indebida digno de condena.
Contaban al menos con tres partes importantes: una gratificación por los servicios prestados, una renta vitalicia garantizada por la aseguradora Caser, que podía capitalizarse en el momento de la extinción del contrato –las millonarias prejubilaciones– y un plan de pensiones también millonario que procedía del anterior plan de pensiones que tenían en Caixanova.
Los 29,9 millones que costó a Novacaixagalicia indemnizar a José Luis Pego, Gregorio Gorriarán, Óscar Rodríguez Estrada y el absuelto Javier García de Paredes, computan los dos primeros conceptos. Las prejubilaciones eran capitalizables en el momento de la extinción del contrato.
Sumado este concepto, Pego se llevó 11,7 millones y Gregorio Gorriarán 7,63 millones, según el cálculo realizado por la Audiencia Nacional en su sentencia condenatoria de 2015, que ahora les reclama la devolución de 10,4 millones por responsabilidad civil.
Compromisos adquiridos de 22,1 millones
Aunque la Audiencia actuó sobre estas indemnizaciones, reconocía además que los directivos contaban con pólizas de seguros y planes de pensiones constituidos a su favor por valor de 22,1 millones que habían sido otorgadados en ejercicios anteriores.
«De este modo, los importes pagados a los cuatro exdirectivos en concepto de indemnizaciones y compromisos de pensiones ascendieron a 52 millones de euros», concluía el equipo inspector. En esta cuantía, los 22,1 millones, estaban incluídos los correspondientes a Pego, Gorriarán, Rodríguez Estrada y García de Paredes, sin especificar qué cantidad correspondía a cada uno.
Los planes de pensiones no fueron en ningún momento objeto del proceso judicial, más que por la anulación de los contratos celebrados en octubre de 2010 que reconocían el derecho de los directivos a percibirlos sin añadir modificaciones sustanciales, así como el compromiso de Novacaixagalicia de continuar haciendo aportaciones.
Los directivos eran partícipes del «subplan 1» del plan de pensiones Personal Caixanova y se quería asegurar la continuidad en el plan de pensiones que estableciera Novacaixagalicia. La dotación previa a la anulación se desconoce, pero Novacaixagalicia da pistas en la información remitida a la CNMV, en la que especificaba una dotación de 10,8 millones para Pego, de 9,2 millones para Gorriarán y de 8,1 millones para Rodríguez Estrada por este concepto, según publicó El Pais en 2015.
Embargos
Los planes de pensiones son excepcionalmente embargables como última medida ante el impago de una deuda, pero en ningún caso antes de que el beneficiario cumpla la edad de jubilación y comience a cobrar la prestación. El dinero invertido no se puede tocar hasta entonces.