Los Areces recuperan peso en el consejo de El Corte Inglés sin Dimas Gimeno
Carlota Areces regresa al consejo tres años después de su expulsión y Fernando Becker entra como consejero independiente
Tres años después de salir de El Corte Inglés por filtrar información confidencial, Carlota Areces regresa al consejo de administración de la compañía. El nombramiento trasciende pocas horas después de que Dimas Gimeno presentara su renuncia al consejo tras llegar a un acuerdo con la empresa.
Además de Areces, la junta de accionistas celebrada el domingo en la Fundación Ramón Areces también nombró al catedrático de economía Fernando Becker como consejero independiente. El consejo de administración de El Corte Inglés suma ya 11 miembros con los movimientos del fin de semana.
Areces fue la representante de Corporación Ceslar en el consejo de administración de El Corte Inglés hasta 2015, cuando fue expulsada del órgano ejecutivo acusada de haber filtrado información confidencial sobre el jeque catarí Al Thani, que actualmente es el tercer accionista con poco más del 12% de la compañía.
La guerra de El Corte Inglés sigue
La junta de accionistas consiguió muchos de sus propósitos este fin de semana. Llegó a un acuerdo amistoso con Gimeno para no cesarlo, logrando su dimisión del consejo a cambio de una indemnización cuyo importe no trascendió. Con ello, la batalla legal por el cese queda sepultada y eso brinda cierto alivio a la junta.
Tras el acuerdo, Gimeno se comprometió a retirar las demandas de impugnación de su cese como presidente, pero mantendrá las denuncias contra sus primas, las hermanas Álvarez. El acuerdo es laboral, así que el expresidente de la empresa puede seguir adelante con los procesos familiares y accionariales.
En estas circunstancias, los nombramientos del domingo son parte del proceso de renovación de la junta y no representan mayor sorpresa. Los accionistas tenían previsto el cese de Gimeno desde hace varios días y se sabía que el expresidente buscaba un acuerdo amistoso antes de formalizar su salida.
Gimeno está fuera de la presidencia y del consejo. Pero él y su familia todavía mantienen una parte de la empresa a través de la sociedad IASA, que controlan las hijas de Isidoro Álvarez. Ahora, el expresidente busca segregar sus acciones para tener el control sobre ellas, desde los derechos de voto hasta la opción de venderlas.