Muestra de fuerza de la banca española: pide tres veces menos fondos al BCE que hace diez años
Las ratios de cobertura de liquidez de Santander, BBVA y Caixabank superan holgadamente los requisitos del 100% del supervisor
La presidenta del Banco Central, Christine Lagarde. EFE/EPA/ARMANDO BABANI
La quiebra de Silicon Valley Bank ha vuelto a poner el foco en los balances de los bancos, sobre todo, en liquidez y solvencia. Mientras en Estados Unidos se debate si la relajación de la normativa bancaria aprobada por Donald Trump pudo ser la causa para el colapso de los dos bancos, tanto SVB como Signature eran bancos medianos. En Europa, los expertos consideran que la situación es diferente a la de 2008 y que años de ajustes regulatorios han dados sus frutos. El último dato de peticiones de la banca española al Banco Central Europeo fue de 118.502 millones de euros, un 9,5% menos que un mes antes. Una cifra que apoya la tesis de que la banca española tiene capacidad suficiente para hacer frente a sus compromisos.
Las socilicitudes de la banca española de fondos al supervisor acumulan una tendencia a la baja de seis meses consecutivos, sumado a otros cinco meses en tablas. Las peticiones de los bancos españoles fueron menos de la mitad que las registradas hace un año cuando se elevaron hasta 289.689 millones de euros. Si se abre el foco, en toda el área del euro, las peticiones de fondos se redujeron también en febrero, un 4,4 %, hasta 1,248 billones; en febrero de 2022, las peticiones de fondos al BCE se situaron en 2,201 billones.
Para poner en contexto la cifra de los bancos españoles basta observar los datos récord de los meses anteriores y posteriores al rescate de Bankia en el verano de 2012, la cifra de peticiones de liquidez era de casi tres veces más. Concretamente, en agosto de 2012 cuando se registró récord, las peticiones de los bancos españoles alcanzaron los 337.538 millones de euros.
En el aquel momento los mercados estaban cerrados y el riesgo país cotizaba al alza con la prima de riesgo española en máximos. Una situación que hacía que las entidades tuvieran que acudir con mayor necesidad al Banco Central Europeo para afrontar sus necesidades de liquidez. Posteriormente, el supervisor europeo creó unas líneas especiales, conocidas con las siglas de LTRTO, en condiciones de ventajosas para las entidades con el objetivo de que el crédito volviera a fluir a la economía real.
Hoy las cosas han cambiado y los bancos cuentan con una situación cómoda para hacer frente a los compromisos. A finales del año pasado, el Banco Central Europeo cambió su hoja de ruta en la política monetaria para combatir la galopante inflación y empezó un giro muy agresivo en la subida de los tipos de interés, que fue posteriormente acompañado con el fin de los programas LTRTO III. Todo con el objetivo de enfriar la economía para lograr el mandato del BCE: una inflación en el entorno del 2%.
Las ratios de liquidez de Santander, BBVA y Caixabank
“Tenemos una base de depósitos muy estable apoyada en el elevado porcentaje de depósitos minoristas y una estrategia conservadora de liquidez, que nos han permitido financiar a nuestros clientes en entornos adversos y mantener unas ratios de liquidez muy por encima de las requeridas”, apunta Santander en su memoria anual. “Gracias a todo ello, estamos devolviendo aceleradamente los fondos TLTRO, ya hemos devuelto 61 mil millones de euros, fundamentalmente por la matriz, que ha reembolsado 56 mil millones, al tiempo que hemos mantenido la ratio de liquidez a corto plazo (LCR) entre las mejores del mercado”, explica.
El coeficiente de cobertura de liquidez (LCR) compara la relación entre este colchón de liquidez y las salidas que puede tener que afrontar la entidad en un periodo de 30 días. La regulación establece que este porcentaje sea al menos del 100%, aunque en el caso de los grandes bancos españoles lo hacen con creces.
En sus cuentas del último trimestre de 2022, Santander recoge un LCR de 169%. Por su parte, BBVA señala que la ratio de cobertura de liquidez (LCR, por sus siglas en inglés) del grupo se mantuvo “holgadamente por encima del 100% durante el año 2022 y se situó en el 159% a 31 de diciembre de 2022”.
“Para el cálculo de esta ratio se asume que no se produce transferencia de liquidez entre filiales; esto es, ningún tipo de exceso de liquidez de las filiales en el extranjero está siendo considerado en la ratio consolidada. De considerarse estos excesos de liquidez, la ratio LCR en el Grupo BBVA se situaría en el 201%”, añaden.
En el caso de Caixabank, apunta en su memoria anual que los niveles de liquidez del sector financiero “siguen siendo elevados”.
“La ratio LCR se sitúa en el 193 % (frente al 203 % en diciembre del 2021). No obstante, el cambio en las condiciones de las facilidades de financiación del BCE para los bancos (las llamadas TLTROs), que promoverá una devolución anticipada de las mismas, tendrá un impacto negativo en las ratios de liquidez de las entidades financieras, aunque se espera que sigan manteniéndose cómodamente por encima de los requerimientos”, señalan.
