Las webs de piratería saltan la última barrera de la justicia española
Las productoras ya no atacan a los propietarios de las webs de piratería, tratan de bloquear su acceso. La solución: clonar las páginas con otros dominios
Hubo un tiempo en el que las grandes productoras de Hollywood trataron de acabar con las webs de piratería persiguiendo a sus administradores. Los intentos para cerrar las páginas fueron en vano y tras redefinir su estrategia cambiaron el objetivo: bloquear su acceso. En febrero obtuvieron una victoria histórica en los tribunales, pero poco les duró la fiesta. Apenas un mes después, los portales ya funcionan a través de dominios prácticamente idénticos procedentes de otros países.
El pasado 13 de febrero, el juzgado de lo mercantil número 6 de Barcelona obligó a Telefónica, Vodafone, Ono, Orange y Xfera que imposibilitaran el acceso de sus clientes a Hdfull y Repelis por violar derechos de propiedad intelectual. La decisión era histórica. Sentó un precedente. Era la primera vez que algo así sucedía en España.
El magistrado Javier Fernández atendió así a las peticiones de seis grandes estudios de cine (Columbia, Disney, Paramount, Fox, Universal y Warner) por “la exhibición ilegal” de películas y series en ambas páginas.
Poco duró la alegría en Hollywood: las páginas utilizan dominios de Montenegro para saltarse la ley
No obstante, pocas semanas duró el bloqueo. Si bien es imposible entrar en los dominios originales y las operadoras cumplieron de inmediato con la orden judicial, ambas pusieron en marcha otras páginas de nombre prácticamente idéntico y sólo cambiaron el origen de la web. Por ejemplo: Hdfull añadió a su red un acceso a través del dominio nacional de Montenegro una vez ejecutado el auto sobre el dominio ubicado en Tuvalu.
«En el texto del juez se abre la vía para que se puedan bloquear otros dominios que surjan desde el mismo portal», explican fuentes de la industria.
Saben, eso sí, que comienzan una batalla imposible de ganar: «es como poner puertas al campo», asumen. El camino busca desanimar a los usuarios que consuman piratería de forma esporádica, son conscientes de que acabar con estos servicios es imposible. «La persona que realmiente quiere piratear tiene los conocimientos tecnológicas y buscará las alternativas necesarias para seguir haciéndolo», explican.
El modelo de Portugal como ejemplo
El cierre de páginas será más lento que en otros países. En Portugal, las productoras y las operadoras tienen un acuerdo en el que las primeras comunican a las segundas qué portales incumplen las normas de propiedad intelectual. «En España la legislación siempre ha sido muy garantista, debes probar que los enlaces alojados en las páginas corresponden a contenidos tuyos, por lo que es muy complicado que se aplique un modelo similar», lamentan. Gracias a esta medida se ha reducido el consumo alrededor del 70%, explicaba hace semanas la directora general de la Coalición de Creadores, Carlota Navarrete.
En la Unión Europea se ha bloqueado el acceso a más de 2.000 páginas webs desde el año 2010 por vulneración de la propiedad intelectual.