Las diferencias entre los socios sacuden a Llorente y Cuenca
La ruptura sentimental de la pareja fundadora desemboca en un enfrentamiento por la continuidad y el valor de las participaciones accionariales
No siempre una buena posición de mercado comporta tranquilidad en el seno de una compañía. El ejemplo es la situación interna que vive en las últimas semanas Llorente y Cuenca, una de las empresas líderes en consultoría de comunicación en España y América Latina. Olga Cuenca, presidenta ejecutiva, y José Antonio Llorente, consejero delegado, mantienen diferencias notables sobre el futuro y la continuidad de ambos en la empresa. Enfrentamiento que ha llevado a la consultoría a una situación de bloqueo accionarial y al precipicio del enfrentamiento legal.
Los dos socios fundaron la compañía en 1995 cuando procedentes de Burson Masteller decidieron emprender una aventura en solitario. Además de exitoso tándem profesional, Cuenca y Llorente han sido durante muchos años pareja sentimental. Ahora, con visiones y estrategias personales diferentes, los dos socios mayoritarios intentan desenredar un alambicado conflicto sobre la propiedad, según ha podido corroborar Economía Digital.
Las diferencias se precipitan tras la ruptura sentimental de la pareja. Tanto Olga Cuenca como José Antonio Llorente poseen cada uno un 40% del capital de la consultora. El 20% restante del capital se distribuye entre otros socios profesionales que se han incorporado en los últimos años al grupo.
Oficina de Brasil
Fruto de las divergencias, la pareja se distribuyó las funciones en la compañía de tal forma que Olga Cuenca se encargó del desarrollo del negocio en Brasil, mientras que Llorente se ocupó durante meses del negocio español. Pese al éxito de expansión registrado en otras plazas de América Latina, la de Río de Janeiro ha sido una oficina con menor rentabilidad y una necesidad permanente de inversiones. Controlada por Cuenca, la actividad en Brasil se ha convertido en un lastre para el grupo.
Ante esa situación y las diferentes visiones y estrategias de los dos accionistas mayoritarios, la presidenta ha intentado desprenderse de su participación en un grupo que facturó 15,75 millones de euros el último ejercicio. Sin éxito. “Hace meses –reconocen desde la compañía–, se exploró la posibilidad de transferir esas acciones a los socios. No hubo acuerdo sobre la valoración y se paró la negociación”. Aunque sus portavoces, expertos profesionales en la comunicación de conflictos y situaciones de crisis, intentan minimizar el enconamiento, otras fuentes conocedoras de los acontecimientos aseguran a Economía Digital que la situación ha derivado en amenazas cruzadas de acciones legales.
“Es probable que no lleguen a los juzgados. Al final este es un tema de oferta económica. Lo que está por ver es si Olga acepta las condiciones que le han ofrecido”, aseguran medios próximos a la compañía informados de la situación. Llorente cuenta con el apoyo de los socios minoritarios, lo que le permite mantener una posición de fuerza en la situación actual, explican fuentes internas de la consultora que exigen el anonimato.
Buen resultado, mal entendimiento
Mientras se resuelve cuál de los socios fundadores abandona el grupo para evitar una parálisis decisoria interna, Llorente y Cuenca mantienen sus cargos formales tanto en el consejo de administración como en la junta de accionistas.
En el último ejercicio, y pese a los problemas entre la propiedad, Llorente y Cuenca facturó el 16,6% más que el año anterior. El 56% de esos ingresos por honorarios procede de América Latina, un mercado que se ha convertido en prioritario para la consultora española y en el que ha acompañado el desembarco comunicacional de diferentes multinacionales españolas durante los últimos años.
El grupo de comunicación ha sido durante el último año uno de los más activos en los procesos de divulgación de la reestructuración de las cajas de ahorro. Durante ese ejercicio ha trabajado para la integración de Caja Duero y Caja España, así como las entidades catalanas que han conformado Catalunya Caixa. Según señala la propia empresa, además del liderazgo del sector en España, la consultora formaría parte de las 50 empresas mundiales más relevantes en su ámbito de actividad.