Las cámaras de comercio catalanas reclaman una fábrica de semiconductores en Cataluña

Las cámaras de comercio catalanas han reivindicado este mismo miércoles que una de las futuras fábricas de semiconductores europeas se ubique en Cataluña. Además, las cámaras catalanas aplauden el anuncio que hizo este pasado lunes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de dedicar un nuevo Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) a los microchips y los semiconductores, un proyecto que tendría una inversión pública de 11.000 millones de euros.

En esta línea, las cámaras han recordado que participan en la iniciativa FabCat, dada a conocer a finales de 2021, y que busca promocionar a Cataluña como sede de algunas de las fábricas de semiconductores que se deben construir en la Unión Europea.

Se trata de una iniciativa avalada por las cámaras, por las universidades Universidad de Gerona, Universidad Autónoma de Barcelona, Universidad de Barcelona, Universidad Politécnica de Cataluña y Universidad Rovira y Virgili, por centros de investigación y desarrollo como el Instituto de Microelectrónica de Barcelona y Eurecat, por empresas suministradoras y por grupos de voluntarios coordinados por el Tecnoateneu de Vilablarteix.

De esta manera, la propuesta se ha hecho llegar a los principales departamentos del Govern y también al ministerio de Industria, recuerdan las cámaras catalanas, que reivindican la necesidad de contar con fábricas propias de semiconductores en Europa para evitar la dependencia de las plantas situadas en otras partes del mundo. Por otra parte, el presidente del Gobierno durante la presentación del mencionado Perte señaló que «España no va a perder la carrera ante la tecnología más avanzada» por lo que quiere que el país  esté «a la vanguardia del progreso industrial y tecnológico».

De esta manera, en línea con este objetivo marcado, el jefe del Ejecutivo incidió en que este PERTE es «una gran apuesta», calificada por él mismo como «ambiciosa» y «audaz», ya que avanza en la autonomía estratégica de Europa. Y es que la escasez de microchips y semiconductores fue la causa de importantes cuellos de botella en la economía mundial tras los confinamientos asociados a la pandemia, por lo que la Unión Europea mostró su intención de aumentar la fabricación de estos componentes para reforzar su autonomía.

Concretamente, los semiconductores son pequeños elementos requeridos por cualquier dispositivo de última generación, algo que hace resaltar su importancia. Estos se utilizan en aparatos como móviles y ordenadores, pero también en otros objetos cotidianos que han ido incorporando funciones digitales como los electrodomésticos, las tarjetas de crédito o incluso los coches.