La subida de tipos ‘inyectará’ 700 millones a las cuentas de BBVA 

Los bancos españoles empiezan a ver la luz al final del túnel, ya contemplan dos subidas de tipos de interés este año y hasta cinco el año que viene. Esto se traduce directamente en una mejora de sus márgenes de interés, que llevan años penalizados precisamente por los tipos negativos. El repunte de la inflación a consecuencia de la guerra de Ucrania ha acelerado los planes del Banco Central Europeo y algunas entidades empiezan a calcular cómo será su impacto en el beneficio.  

Así, durante la última semana del mes de abril, en la que presentaron resultados los cinco bancos más grandes del país, Caixabank y BBVA aclararon que el impacto no se verá hasta dentro de doce meses, pero será muy positivo. “Si hay una cosa que afecta positivamente a los bancos es la subida de tipos de interés porque ganas margen de intereses y elevas el resultado”, apuntaba el consejero delegado de BBVA, Onur Genc.  

El escenario que contempla el banco vasco es, que si suben 100 puntos básicos de una vez, el margen de España crecería entre un 15% y un 20%. “El impacto sobre la cuenta de resultados seria de 500 a 700 millones más (antes de impuesto) en doce meses”, añadía. En este sentido explicaba que en su caso, las hipotecas se reprecian cada 6 meses.  

BBVA da por hecho que ese impacto positivo se apreciará en poco tiempo y por eso han decidido revisar al alza las previsiones en España. En concreto, el banco trabaja con dos subidas este año, una en septiembre y otra final de año, pero también con otras cuatro más en el 2023. Aunque saben que la situación todavía genera “mucha incertidumbre”. 

Las subidas, agregaba el CEO, ayudarán incluso a recuperar los 100 millones que van a restar por la retirada de las del TLRO. El banco también contempla ahora una subida del margen en México, hasta el doble digito. Allí el banco central ya ha subido los tipos 100 puntos básicos este año pero descuentan que habrá subidas adicionales de 150 o 175 puntos adicionales. 

El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, también reveló que una subida de 100 puntos básicos (del 1%), mejorará el margen de intereses del banco entre un 20% y un 25% en doce meses. “El balance tarda en repreciarse”, señalaba.

La entidad catalana ha presentado al cierre del primer trimestre un margen de intereses de 1.550 millones de euros, lo que supone una caída del 5,4% respecto al mismo periodo de 2021, precisamente por el entorno de tipos de interés negativos.  

Pero la situación se revertirá pronto, el BCE ha reforzado la expectativa de que terminará su programa de compras de deuda pública en el tercer trimestre y que después comenzará a subir los tipos de interés. Los mercados anticipan en estos momentos que este mismo año los tipos de referencia ya dejarán de ser negativos y que hasta finales del año próximo podrían producirse siete u ocho subidas de tipos de 0,25 % cada una. 

414 millones de provisiones por la guerra 

Pese a que el escenario pinta ahora mucho mejor para la banca, BBVA y Caixabank quieren ser prudentes y han decidido provisionar 414 millones de euros por los efectos de la guerra de Ucrania. Según ambas entidades, se trata de efectos de segunda ronda, como el encarecimiento de las materias primas, de los precios de la energía y en general, de los costes. 

Así, BBVA ha reservado otros 200 millones en lugar de liberar provisiones. Y de esta cantidad, unos 97 millones son para España. Según explicó el consejero delegado, el banco tiene tres niveles distintos de impacto. Los directos, la exposición con clientes de los países en conflicto, que se limita a 50 millones. Los de los clientes que hacen negocio con ellos y los impactos indirectos. 

Aquí se incluye la subida del precio de las materias primas, gas, petróleo o alimentos, que tiene un impacto directo en la inflación de Europa y debido a eso habrá menos crecimiento económico. “Hasta ahora estamos tranquilos, pero hay que vigilar la situación”, comentaba. 

En la misma línea, Caixabank ha decidido crear un fondo, al que ha dotado con 214 millones de euros que incluye el impacto de la guerra en las familias y empresas. “No nos afecta directamente, pero si en la subida de precios de la energía y materias primas”, además de las relaciones de comercio exterior de los grandes socios comerciales. 

En paralelo, el banco ha apreciado la capacidad de pago que están teniendo sus clientes con los créditos que se concedieron en el inicio de la pandemia y han decidido liberar 199 millones de las dotaciones que realizaron en 2020. Por tanto, “baja el fondo Covid y sube el de la guerra, y en neto son 15 millones de euros de impacto en la cuenta de resultados, señalaba Gortázar.