La retirada de un aval bancario ocasionó la fractura de los Sánchez Vicario
Emilio Sánchez retiró un dinero que estaba reservado para pagar las deudas de Arantxa con Hacienda. Al quedar la cuenta vacía, el banco ha demandado a la tenista que deberá pagar dos millones en intereses
Una mala operación financiera del padre de Arancha Sánchez Vicario, Emilio Sánchez, hace cinco años, desencadenó la ruptura de relaciones hasta ahora insalvable entre la tenista y su familia. En un viaje que realizó con su esposa a Ginebra, Emilio Sánchez, aprovechó para transferir dinero desde algunas cuentas en Luxemburgo a Suiza, según ha podido saber Economía Digital.
En una de las operaciones, el 13 de febrero del 2006, Sánchez retiró 3.530.000 euros de una cuenta del banco de Luxemburgo que servía de contraaval a otra cuenta del Banco de Sabadell donde se ejecutaría la deuda que la tenista fue obligada a pagar por evasión fiscal. Una vez que Hacienda cobró la deuda del Banco de Sabadell, la entidad reclamó el pago al banco de Luxemburgo, pero ya no había dinero.
El padre no se había percatado –aseguran fuentes cercanas– de que ese dinero no podía ser tocado y el error le costó a Arantxa una demanda del banco de Luxemburgo y dos millones de euros en intereses, según explica su abogado Juan José Burgos.
El padre de Arantxa transfirió el dinero a la gestora Gestgam. Pero Emilio Sánchez también dispuso de 2,2 millones de dólares para invertirlos en los fondos de estafa piramidal Madoff y perdió toda esa cantidad en diciembre del 2008 cunado se concretó el desfalco.
Retiros en dólares
La mala inversión terminó de romper las relaciones de Arantxa con su familia. Después de su segunda boda, la tenista comenzó a pedir explicaciones y optó por la ruptura total que ha terminado en los juzgados. El retiro del dinero también sirvió de base para que su hija lo acuse de administración desleal en un tribunal de Andorra.
En el mismo viaje a Ginebra, el padre de Arantxa también retiró dinero en dólares de Luxemburgo: 4 millones de dólares y un millón más en un producto financiero de Morgan&Stanley. Arantxa asegura que no sabe dónde está ese dinero, según consta en la declaración que presta la tenista en los juzgados de Andorra.
Fuentes cercanas a su padre, no obstante, aseguran que los fondos fueron transferidos a la gestora suiza Gestgam para centralizar el capital de la tenista y facilitar así su gestión. La familia niega haberse quedado con dinero de la tenista y también desmiente que esté arruinada, como Arantxa aseguró al anunciar el libro.