La plantilla de BBVA protagoniza la primera huelga de la banca en 30 años
Carlos Torres debe hacer frente a la primera huelga de la historia en BBVA
La plantilla de BBVA en España está convocada a huelga este miércoles 2 de junio para protestar contra el ERE. Se trata de la primera huelga protagonizada por un banco en 30 años, según los datos recogidos por los sindicatos consultados por Economía Digital.
Desde CCOO destacan que en este tiempo ha habido alguna huelga a nivel regional o local, pero a nivel estatal, la última que se recuerda fue en 1991, cuando Caja Postal de Ahorros dejó de ser un servicio público. Desde UGT se remontan a las históricas huelgas del sector financiero en los 80 para señalar que lo que está ocurriendo ahora en el sector llevaba décadas sin verse.
El sindicato mayoritario también detalla que la de hoy es la primera huelga en la historia de BBVA. El caso que le tocó más de cerca fue en 2015, cuando BBVA -todavía con Francisco González al frente- iba a integrar a CatalunyaCaixa y aplicar un ERE. Los trabajadores de la entidad catalana se echaron a las calles, hicieron paros parciales y acabaron yendo a huelga después de años de ajustes de personal, la entrada del Frob y los líos de la cúpula de la entidad con la justicia.
El escenario en el que se encuentra Carlos Torres, actual presidente de BBVA, es muy distinto. La plantilla aqueja que el banco pusiera sobre la mesa un despido colectivo para 3.800 trabajadores sin razón aparente, pues el caso mas similar (el ERE de Caixabank) “al menos tiene la excusa de la fusión”, explican desde CCOO.
Sin embargo, BBVA no se encuentra inmerso en ninguna operación de este tipo, presentó un beneficio de 1.210 millones hasta marzo y acaba de cerrar la venta de su negocio en Estados Unidos por 9.600 millones de euros.
Pero Torres explicó durante la junta general de accionistas de la entidad que el ERE puesto en marcha es “necesario” para garantizar la viabilidad futura de la entidad. En concreto, porque el sector bancario se encuentra en un proceso de transformación motivado por la presión competitiva, los tipos de interés negativos, la entrada de nuevos actores del mundo digital o los nuevos hábitos de los clientes.
Solo unos días después, el consejero delegado del grupo, Onur Genç, puntualizaba que las transacciones en las oficinas de BBVA han caído un 50% en dos años, y al tiempo se han multiplicado por dos las gestiones a través de los canales online. Lo que lleva al banco a cerrar sucursales y en consecuencia, prescindir de personal.
Un argumento que sigue sin convencer a los sindicatos, que creen que la cifra de salidas propuesta por la dirección del banco es desproporcionada, más si cabe, teniendo en cuenta que este viernes 4 de junio termina el periodo formal de negociaciones entre las partes y no se contempla cerrar un acuerdo porque el banco solo ha reducido el número de despidos hasta 3.305.
En las últimas semanas y desde el día 10 de mayo, la plantilla ha llevado a cabo varias movilizaciones frente a las sedes del banco en todas las ciudades de España con el objetivo de que BBVA reciba el mensaje y opte por reducir el número de salidas y mejorar las condiciones económicas. Asimismo, los trabajadores ya han hecho paros parciales dos días.
E incluso en Cataluña, Galicia y País Vasco ya hubo huelga la semana pasada. En estas comunidades se cerraron prácticamente el 100% de sucursales y a la par hubo concentraciones masivas frente a las sedes del banco.
La hoja de ruta para este miércoles es similar, la huelga es de 24 horas y habrá movilizaciones en puntos clave, solo que esta vez se llevará a cabo de manera conjunta en toda España. Y esto puede complicar bastante que el banco ofrezca sus servicios con total normalidad.
En CCOO y UGT, los sindicatos que han convocado la huelga junto a ACB, desconocen cuál será la aceptación y participación de la huelga, pero no contemplan que haya servicios mínimos en el caso de que fuera un éxito.
En este sentido recuerdan que los canales online estarán activos, se pueden hacer operaciones en cajeros y pagar con tarjeta, todo lo demás “tendrá que esperar”. Los mismos piden al banco que reaccione, amplíe el plazo de negociación del ERE y modifique las condiciones laborales de todos los recolocados que trabajarán en el servicio de atención al cliente.
La plantilla de Caixabank convoca dos días de huelga
En Caixabank se lidia otra batalla muy similar. El banco que preside José Ignacio Goirigolzarri puso encima de la mesa 8.300 despidos tras la fusión con Bankia y a nueve días de que acabe el periodo formal de negociaciones, el banco y los sindicatos siguen lejos de acercar posturas.
Así que a plantilla también empieza a hacer paros parciales este mismo miércoles, de media hora. Y los repetirá el próximo 7 de junio, esa vez de una hora. Pero además, los representantes sindicales han convocado dos días de huelga, el 9 y 14 de junio pese a que deben llegar a acuerdo el día 10.
Desde UGT explican que la convocatoria del día 14, más allá del plazo legal, podría cancelarse si finalmente las partes llegan a un acuerdo. Pero si acabado el plazo, sigue sin haber acuerdo y Caixabank decide actuar de manera unilateral no solo irán a huelga sino que el ERE acabaría en manos de la justicia.
Actualmente, la entidad catalana ha elevado el número de recolocaciones internas dentro del grupo hasta las 686, lo que reduce el número de afectados a 7.605 personas desde los 8.291 iniciales.
Pero los sindicatos siguen manteniendo que mientras no se negocien las condiciones laborales en exclusiva para ellos (quieren un modelo de excedencia especial de grupo) seguirán computándolo como un despido forzoso más. Pues a estas personas también se les tiene que despedir en Caixabank y dar de alta en una filial, de la que desconocen si las condiciones económicas son peores que las que tienen actualmente.
Paralelamente, el sindicatos mayoritario de Caixabank -que coincide con el de BBVA y en general, con el de la mayoría de bancos en España- comentan que este miércoles llevarán a cabo concentraciones conjuntas.